23:58, Seúl, Pub Hallyu Soul
- Aquí falta
gente, no? - preguntó Kibum contando por encima.- No falta Sungmin?
Kyuhyun bajó
la mirada, avergonzado por todo lo que había pasado aquella noche.
"Sungmin..."
- Yah,
Kyuhyun... - Siwon se acercó seguido de Donghae, ambos con rostros serios.-
Podemos hablar un momento?
- Ahora
mismo no estoy de humor...
- Qué
vengas! - Donghae le agarró del brazo y de un empujón lo puso en pie y se lo
llevaron al servicio.
- Qué pasa?
- Kyuhyun se sentó en la encimera de los lavabos y fijó la mirada en las
baldosas negras del suelo.
- Eso
queremos saber nosotros... Qué está pasando? - respondió agitadamente Donghae.
-
Tranquilízate Donghae, quieres? - le dijo Siwon.- Kyuhyun, estamos preocupados.
Sungmin está demasiado distinto últimamente, y sabemos que es por ti. Estamos
cansados de intentar ayudarle y que él con una sonrisita dulce y su voz afeminada
nos diga "estoy bien"... no se lo cree nadie, y sabemos que es por
ti.
Kyuhyun
levantó la mirada, fijándola en sus dos compañeros y volviendo a bajarla poco
después.
- Kyuhyun...
no sabemos lo que ha pasado entre vosotros dos... Ni siquiera sabemos si le
sigues queriendo, pero necesitamos que hables con él, que le dejes las cosas
claras, si le quieres o si no, Sungmin habría dado su alma al diablo por ti
cuando estabais juntos, seguramente incluso ahora, después de tantas lágrimas
todavía lo seguiría haciendo...
Un silencio
se hizo en el baño, solamente se escuchaba la música del pub de fondo.
- Oh, por el
amor de dios! Eres imbécil, Kyuhyun? - Donghae explotó, lanzándole un rollo de
papel higiénico que le dio en toda la cabeza a Kyuhyun, quien levantó la mirada
claramente sorprendido. - Es que no eres capaz de ver que todavía le quieres?
Que todavía te quiere? Él lo dio todo por ti! Te lo entregó todo! Cambió su
aspecto, y su modo de ser, ya no es tan tímido ni tan reservado, el Sungmin de
antes jamás habría intentado darle celos a alguien, ni siquiera habría dicho
"hola" a alguien por sí mismo! Pero él ahora toma sus propias
decisiones, se ha entregado a ti! Por qué no lo ves?
Siwon le agarró
del brazo y le hizo un gesto brusco para que se callase y dejase de soltar
perlitas por la boca... Kyuhyun estaba llorando.
- Que no lo
veo, dices? - Levantó la mirada con un gesto furioso en el rostro. - QUÉ ES LO
QUE NO VEO EXACTAMENTE, LEE DONGHAE!? Claro que veo que se ha entregado, veo
sus cambios, veo que aunque yo fui lo más cruel posible con él, él sigue
sonriéndome cada día! Le quiero como a mi propia vida! No, más! Daría mi vida por
él! ... - Kyuhyun bajó la mirada, con la mandíbula tensa y golpeó la encimera
de mármol con los puños con todas sus fuerzas. - Pero no podemos estar juntos,
es imposible... y eso hace que se me escape la vida por los dedos, sin poder
detenerlo, las ganas de vivir se me van y yo no logro detenerlas...
Donghae, por
primera vez en la noche, le miró con compasión y, haciendo de tripas corazón,
le entregó un trozo de papel para secarse las lágrimas.
- Por qué no
podéis estar juntos? Si le quieres, qué más da todo lo demás? - Donghae le
sonrió mientras le cedía un trozo más de papel.
- No puedo
decíroslo... Sonaré como un idiota.
- Más? -
Donghae recibió un codazo de Siwon.
- No tienes
que decírnoslo, pero solamente quiero decirte dos cosas... La primera es que en
la vida hay que tener prioridades, tienes que saber qué merece más la pena, la
persona a la que amas o tu secreto.
Kyuhyun
levantó la mirada.
- Y la
segunda es que, conociendo a Sungmin tan bien como le conoces, crees que él no
sabe que te ocurre algo a ti también? Quizás si se lo hubieras explicado desde
el principio las cosas no hubieran salido así, no crees?
Siwon le
sonrió y salió del baño.
- Oye...
perdón por lo del papel higiénico... Te lo dejo aquí, vale? - Donghae también
le sonrió y abandonó el baño.
Kyuhyun,
solo en la estancia, se bajó de la encimera y haciendo un acto de valor, se
miró en el espejo. Jamás había sentido tanto desprecio al ver a alguien, y eso
que era él mismo. Mirándose a los ojos, recordó brevemente aquellos momentos
con Sungmin, aquellos momentos fueron los únicos de su vida en los que
realmente se sintió feliz, aquellos por los que mereció la pena haber dejado su
anterior vida atrás, todo era perfecto hasta que Zhoumi tuvo que aparecer...
Iba a tener que volver a ceder lo más importante de su vida para que él fuese
feliz? Incluso si lo más importante era Sungmin? ...
- Siwon! -
Kyuhyun corrió por el pasillo de la discoteca hasta que alcanzó a la pareja.
- Siwon... Dónde está Sungmin?
Una sonrisa
orgullosa se formó en la sonrisa de Siwon y Donghae.
- Se ha ido
con Zhoumi.
- Eso ya lo
sé, pero a dónde?
- Mmmm...
creo que iban a volver al hotel. - Respondió Donghae.
Kyuhyun ni
dio las gracias, salió corriendo como alma que lleva el diablo.
"Sungmin,
espérame... Ahora voy!"
00:20,
Seúl, Hotel
La vista de
Seúl de noche es preciosa... Aunque las estrellas no puedan verse, hay miles y
miles de luces de colores que rompen la oscuridad... Me gusta que no haya
oscuridad, aún me aterroriza, aunque ahora me enseñaste a no temerla,
Kyuhyun...
-
Sungmin...- Zhoumi estaba tumbado a mi lado en la cama, yo miraba por la
ventana con los ojos llenos de lágrimas que no caían, y Zhoumi rodeándome la
cintura con un brazo mientras me besaba el cuello.
- Sí? -
Respondí monótonamente, la adrenalina que sentía hace un par de minutos se
había evaporado dejando una sensación de vacío y un agotamiento sobresaliente.
- Relájate o
te dolerá... - Zhoumi sonrió y colando sus manos por debajo de mi camiseta,
acariciaba todo mi cuerpo. Sus manos estaban heladas, y al contacto con el
terrible calor que yo sentía, era incluso desagradable.
Cerré los
ojos. Debido al alcohol aún no era muy dueño de lo que mi cerebro hacía o
dejaba de hacer, y el único pensamiento que permanecía en mi mente en todo
momento era "Kyuhyun..."
Cuando las
manos de Zhomi me arrebataron la camiseta, además de los pantalones y me tumbó
boca arriba, besándome con ansias, mi corazón se partió en dos... No era capaz
de moverme, mi mente gritaba histérica por auxilio, chillando con desesperación
el nombre de esa persona que no iba a venir... Aquellas manos frías y
desconocidas no me gustaban, descubrí donde estaba el límite de amor y amistad
cercana... La amistad cercana puede confundirse con amor, pero en el momento de
la verdad es cuándo realmente queda claro lo que uno siente...
- Zhoumi...
- Logré pronunciar entre lágrimas, y gracias a dios, él me miró a la cara antes
de continuar bajando su mano hacia mi inexistente excitación que no se
manifestaba en ninguna parte de mi cuerpo.
- Qué
ocurre? - me miró inexpresivo.
- Podrías...
parar?
La sorpresa
se notó claramente en su rostro.
- Por qué?
No te gusta?
- No es
eso... - intenté incorporarme sin éxito, Zhoumi estaba firmemente colocado
encima mía y no parecía tener intención ninguna de moverse.
- Entonces
qué pasa?
- Que el que
no me gustas eres tú...
Zhoumi no
cambió su expresión ni un poco, siguió mirándome con esos ojos castaños de
forma inexpresiva, no podía leer nada en ellos... no sabía si le había dolido,
sorprendido, ni alegrado... no sabía nada de lo que se le estaba pasando por la
cabeza en esos momentos.
Entonces, en
ese momento, fui yo el que se sorprendió al verle sonreír felizmente, aunque
admito que también me asusté un poco, pues Zhoumi no se movía, seguía
sujetándome firmemente encima de la cama y sonriéndome con una sonrisa
preciosa, aunque algo distinta...
- Mientes.
- Qué? No
miento!
- Sí que
mientes, tú me quieres, somos novios, estamos saliendo y ahora va a ser nuestra
primera vez, en la excursión escolar, una primera vez romántica y sin
interrupciones.
Le miré con
pánico. Qué le pasaba a este tío en la cabeza?
- Zhoumi...
Suéltame.
- Dime
cuánto me quieres de nuevo Sungmin, al oído, dímelo... - la sonrisa no se le
borraba y seguía acariciando mi cuerpo sin hacerme ningún caso.
- Zhoumi, te
lo digo en serio, estate quieto.
- Yo también
te amo Sungmin, más que a mi vida, y tú me amas más que a Kyuhyun, verdad? Yo
lo sé, lo noto cuando me miras, cuando me ayudas... - rió y me miró con
dulzura. - Relájate o te dolerá...
Yo ya no
sabía qué hacer... Debía gritar?
- No lo
entiendes Zhoumi? Yo amo a Kyuhyun!
- No, me
amas a mí, él te ha hecho mucho daño y yo siempre te he cuidado, recuerdas? -
mientras me besaba el pecho, me quitaba lentamente la ropa interior, yo estaba
poniéndome histérico... En mi mente, todas las alarmas sonaban, intentaba
librarme con todas mis fuerzas, pero Zhoumi era más fuerte que yo...
- Kyuhyun!
KYUHYUN! - opté por la opción más sencilla de todas, chillar hasta que alguien
me hiciese caso, aunque fuese un ama de llaves y entrase y me viese desnudo, me
daba igual, pero necesitaba ayuda...
- No chilles
su nombre, grita el mío, EL MÍO! - Zhoumi me agarró por los hombros y de un
movimiento seco y firme, me dio la vuelta, tumbándome boca abajo... en ese
preciso instante fue cuando mi pánico atravesó el límite.
- KYUHYUN!!
AYÚDAME, KYUHYUN! KYUHYUN! - Las lágrimas de tristeza, miedo, desesperación y
pánico caían, una tras otra, a un ritmo perfecto, al compás de mis gritos de
auxilio que yo sabía que nadie iba a atender...
Entre gritos
y lágrimas, recordé aquella vez que Kyuhyun, loco de celos, también intentó que
lo hiciésemos por la fuerza... el miedo de aquel momento no se parecía en nada
a éste...
- KYUHYUN! -
la garganta empezaba a desgarrarse, mis gritos no durarían mucho más... -
KYUHYUN! POR FAVOR, KYUHYUN!!
- SUNGMIN! -
escuché un grito proveniente del pasillo, aquella voz suave que yo conocía tan
bien, mi nombre sonó claramente en la habitación, estoy seguro de que Zhoumi
también lo escuchó, porque paró en seco.
- KYUHYUN! -
Grité una vez más, forzando mi garganta a límites insospechados, cuando empecé
a escuchar golpes en la puerta, cada uno más fuerte que el anterior.
- SUNGMIN!
Estás ahí!? SUNGMIN!!
- KYUHYUN!!
- La esperanza se iluminó en mi interior, estaba aliviado y miré a Zhoumi,
quién medio desnudo, miraba la puerta sonriente... sonriente?
- Hola
Kyuhyun! - Saludó alegremente.- Qué haces por aquí?
- ZHOUMI!
ALÉJATE DE ÉL AHORA MISMO!
- Por qué?
Es mi novio ahora... ya verás, voy a hacer que te olvide y será solo mío...
Vuelve en un par de horas y hablamos.- soltó una risotada y empezó a
desabrocharse los pantalones.
- Zhoumi,
para por favor! PARA! - Yo grité de nuevo, Kyuhyun no podría tirar la puerta
abajo, y además, el pánico de que no escuchase nada al otro lado de la puerta
me hizo temer que quizás Kyuhyun le había hecho caso a Zhoumi...
- Ves cuánto
te quiere Kyuhyun? Se ha ido! Y ahora estamos tú y yo solos, cariño... - me
sonrió y volvió a hundir su boca en mi cuello. Podría eso ser posible? De
verdad que Kyuhyun me había abandonado? No podía creérmelo...
- Kyuhyun...
- mi cuerpo se cansó de hacer fuerza permanente, estaba agotado, y decepcionado
de que se hubiese ido... ya me daba igual, que Zhoumi hiciese lo que quisiera,
me daba lo mismo... Cerré los ojos y dejé los labios y las manos de Zhoumi
recorriesen mi cuerpo.
Entonces, un
golpe secó se escuchó, yo abrí los ojos y encontré la puerta abierta, la
tarjeta-llave tirada en el suelo y Kyuhyun encima de Zhoumi, los dos en el
suelo y Kyuhyun con cara de querer matarlo...
No podía
moverme, estaba shockeado, solamente podía observar la imagen que estaba a mi
lado, entre las dos camas del cuarto, Kyuhyun aplastaba a Zhoumi contra el
suelo.
- Qué le has
hecho? - le gritó furioso.- Contesta!
-
Kyuhyun...- logré pronunciar.
Se giró y me
miró con alivio al ver que estaba bien, pero entonces, con sus ojos consiguió
ver las marcas rojas por mi cuerpo, algunas de la fuerza que Zhoumi había
aplicado sobre mí, y otras simplemente marcas de sus dientes, más añadir el hecho de que yo estaba
completamente desnudo encima de la cama, despeinado y con los rastros de
lágrimas en las mejillas, hizo que Kyuhyun se incorporase, levantase a Zhoumi
del suelo por la fuerza, y tras empujarlo con todas sus fuerzas contra la
pared, le asestó un puñetazo en la cara.
- Te dije
que no le tocases... Te lo dije o no te lo dije?
- ... -
Zhoumi se acariciaba la cara sin borrar la sonrisa, aún cuando los labios le
sangraban.
- Te lo dije
o no?
Kyuhyun se
preparaba para otro puñetazo, pero yo le detuve.
-
Kyuhyun...- susurré lo suficientemente alto para que me escuchase, mientras me
tapaba con una sábana. Se giró para mirarme con el puño todavía en alto, pero
lo bajó en breves, acercándose a mí lentamente y sentándose a mi lado en la
cama.
- Sungmin...
perdóname... No he podido protegerte... - Me abrazó cuidadosamente por la
cintura y cuando hundió su rostro en mi pecho, empecé a sentir algo húmedo
resbalando por mi torso... Kyuhyun estaba llorando? Aquello me pareció la cosa
más tierna que había visto jamás, Kyuhyun lloraba sobre mí, bajo la mirada de
Zhoumi, que ya no sonreía, desde el otro extremo de la habitación.
- Sungmin...
- apenas era capaz de entenderle, entre sollozos, hipidos y que no vocalizaba,
parecía un niño pequeño... - Sungmin...
- Dime... -
le acaricié la cabeza con ternura.
- Lo siento
mucho... Te quiero tanto... Lo siento mucho... - Kyuhyun no me soltaba, me
tenía firmemente sujeto, aunque con delicadeza, y yo movía mi cuerpo, como
acunándolo, intentando por todos los medios que dejase de llorar.
- No llores
Kyuhyun... - sonreí y él levantó la mirada, tenía los ojos rojos, seguramente
igual que yo, y me acarició la mejilla con una mano, mirándome con esos ojos
negros, pero que hoy tenían un brillo especial, una estrella en el cielo
nocturno.
- Estás
bien? - logró decir por fin.
Asentí
sonriendo lo más tiernamente posible.
- Menos
mal... - Bajó la cabeza suspirando y la
levantó sonriendo. - Sungmin... podrás perdonarme?
Un
escalofrío me recorrió todo el cuerpo, aquello en parte era lo que yo llevaba
esperando meses, pero... Y todo lo anterior? Aún no tenía respuesta para ello!
- Yo...
- Cómo va a
perdonarte? - Zhoumi nos interrumpió, mientras se miraba al espejo, limpiándose
la sangre de la cara con una toallita húmeda mientras se reía, en aquel
momento, si le restamos importancia a la situación, me recordaba un poco al
Joker de Batman.- Has sido un monstruo con él! Le has manipulado, le has hecho
daño, le has hecho llorar, casi deja el colegio por tu culpa! Cómo va a
perdonarte?
Retiré la
vista de Zhoumi, cuándo la volví a dirigir a Kyuhyun, quien con la cabeza baja
apretaba los puños.
- Cómo
puedes tener una cara tan dura, cretino? - le espetó levantándose y mirándole
con frialdad desde el centro del cuarto.
Zhoumi
sonrió y se giró abotonándose la camisa.
- No sé de qué
me hablas...
- Hablo de
que estoy harto de que siempre juegues con la gente que es importante para mí!
La culpa es mía! Por creer que habías cambiado en estos diecisiete años!
Siempre has sido igual... Queriendo lo que yo quiero, teniéndolo aunque yo no
pueda, sacrificando lo que sea con tal de tener lo que yo quiero y no puedo
tener... Vas a seguir robándome mi vida?
- De qué
hablas, Kyuhyunnie? - sonrió con picardía de nuevo, y Kyuhyun ya no pudo
aguantarlo más.
- No me
llames así! No oses volver a pronunciar mi nombre! Una vez te quise Zhoumi,
pero tienes que superar que ya no quiero volver a tenerte en mi vida! Nunca! No
quiero que te acerques a mis seres queridos, no quiero que te acerques a mí, ni
a mi familia ni a nadie! Entiendes?
Zhoumi borró
la sonrisa por unos segundos, aunque enseguida la volvió a construir, un poco
más débil que antes, pero la construyó.
- Kyuhyun...
No me digas esas cosas... Aunque aún me quieras e intentes reemplazar mi lugar acostándote con niñitas monas como él... - me señaló con un dedo acusador.- yo sé que aún
no has conseguido reemplazarme...
- Estás
enfermo... - Kyuhyun volvió hacia mi cama, desde donde yo observaba la escenita
sin enterarme de nada... Qué narices se estaban diciendo? - Sungmin... Ven
conmigo. - Me mostró una mano, y yo, tras mirarle a los ojos, su rostro dolido,
su sonrisa disculpándose y su mano pidiéndome otra oportunidad... cedí. Le tomé
la mano, aún cubierto por la sábana, y él me tomó en brazos, tapándome
cuidadosamente y besándome la frente, ambos nos dedicamos una
sonrisa. Hacía tiempo que añoraba aquella felicidad abrumadora...
- Adiós
Zhoumi... - dijo Kyuhyun antes de cerrar la puerta tras de sí. Caminábamos por
los pasillos del hotel sin pronunciar palabra, Kyuhyun cargándome entre sus
brazos y yo con la cabeza apoyada en su pecho, respirando su aroma una vez
más...
- Kyuhyun,
yo...
- Shhhhh, no
digas nada... espera a que lleguemos a la habitación. - Me sonrió una vez más y
volvió a mirar al frente. Asentí y volví a mi posición.
Una vez hubo
abierto la puerta de la habitación 83, me depositó cuidadosamente en la cama y
abrió su armario.
- Qué haces?
- pregunté mirándole curioso.
Me lanzó un
chándal y una sudadera, y luego abrió un cajón y me lanzó un par de bóxers.
- Póntelos,
no cojas frío. - Lo dijo en un tono pausado, con calma y se giró, mirando a la
pared, seguramente esperando a que yo estuviese ya vestido.
La sudadera
me quedaba un poco larga, pero era cómoda, y tenía ese olor característico de
las prendas de Kyuhyun, así que estaba encantado.
- Ya
estoy... - dije con timidez, y se giró lentamente, sonriendo al verme. La luz
de la habitación no estaba encendida, solamente las luces de colores de Seúl
iluminaban de forma intermitente la sala.
- Te veo
favorecido... - rió metiéndose conmigo.
- Calla...
Sólo me queda un poco larga! - protesté.
- Vale,
vale... no te lo discutiré... - me sacó la lengua y ambos reímos. Yo me senté
en su cama, mirando de nuevo por la ventana. En ese entonces, los momentos que
acababa de vivir con Zhoumi hace un rato, parecían increíblemente lejanos... Noté como Kyuhyun se sentaba a mi lado, la
cama se hundió bajo su peso y ambos mirábamos por el inmenso ventanal.
- Me gusta
esto... - dije
- El qué?
- La noche
de Seúl... Me gusta porque yo no podría tener miedo jamás, no hay oscuridad en
la noche, solamente hay luces... Me gusta mucho.
Kyuhyun
sonrió y me miró.
- A mí me
gustaba más la otra noche, la oscura con estrellas y una gran luna...
- Por qué?
- Porque
sabía que aunque tú tuvieses miedo, yo estaría a tu lado para protegerte, todas
las noches a tu lado... Aunque no lo cumplí.
Yo también
le miré.
- Pasé
muchas noches con miedo.
- Lo sé, y
lo siento...
- Te he
extrañado muchísimo... - bajé la mirada, aquello era muy vergonzoso, no quería
volver a llorar delante suya.
- Ojalá
puedas perdonar todo lo que te he hecho... Lo siento muchísimo Sungmin.
- Sé que lo
sientes, pero que lo sientas, aunque suene egoísta, no me sirve...Si te perdono
ahora y volvemos a estar juntos, yo cómo me quedo? Sin saber por qué durante
estos meses me has tratado como a un desecho humano?
Kyuhyun bajó
su mirada cuando busqué sus ojos, parecía avergonzado, arrepentido... Quizás
estaba siendo muy duro?
-Sungmin...
Yo...
- Sé que lo
sientes...- le corté.- pero quiero saber por qué? Por qué volviste al colegio
sin dirigirme palabra? Sin dedicarme una mirada? Era por Zhoumi? Todo cambió cuando
él llegó, sé que tiene algo que ver en tu vida, en tu modo de comportarte, pero
quiero saber qué.
- No sé si
puedo contártelo...
- Me
engañaste con él?
- Qué!? No,
por dios, Sungmin! - Levantó la cabeza escandalizado, pero vio mi sonrisa
socarrona y adivinó que no era más que una broma.
- Entonces?
Qué puede ser tan malo?
- No es que
sea malo, Sungmin, es sólo que...
- Qué?
Suspiró y se
incorporó mirándome, se le veía confuso.
- Está
bien... Te lo voy a contar... Pero mañana, que hoy estamos todos muy cansados,
tú apestas a alcohol, y yo tengo que pensar a ver cómo te lo cuento...
Me olfateé,
yo no olía nada, pero bueno...
- Bueno,
entonces me voy a dormir... - me dispuse a levantarme de la cama y salir del
cuarto, cuando Kyuhyun me agarró del brazo firmemente, impidiéndome la salida.
- Qué te
crees que estás haciendo?
- Irme a
dormir? - pregunté con ironía intentando zafarme.
- A dónde?
- Creía que
a mi cuarto, pero ahora empiezo a dudarlo... - suspiré y dejé de intentar
resistirme.
- No vas a
volver a tu cuarto, dormirás aquí esta noche.
- Pero... Y
Kibum? - el pobre de Kibum siempre tenía que andar cediendo cuartos, empezaba a
darme pena...
- Que se
busque la vida, ya dormirá con Eunhyuk o con Shindong.
- Planazo...
- dije con ironía riéndome.
- Va en
serio Sungmin... no te vayas. - sonó tan suplicante y necesitado, cual perrito
abandonado, que asentí y me volví a sentar en su cama, abriéndola y colándome
dentro.
- Tú dónde
dormirás? - le pregunté.
- En la otra
cama, tranquilo... - sonrió y también, sin cambiarse de ropa ni nada, se metió
en la que era la cama de Kibum.
- Buenas
noches entonces... - dije cerrando los ojos.
- Buenas
noches.
Se escuchaba
el poco tráfico que había a esas horas de la madrugada desde la habitación, yo
lo apreciaba con los ojos cerrados, pero no conseguía conciliar el sueño,
habían pasado demasiadas cosas esa noche...
- Sungmin...
- la voz de Kyuhyun apagó el sonido del tráfico en mi mente.
- Sí?
- Dormías?
- No...
- Ya veo...
Se hizo un
silencio en la habitación, yo conocía a Kyuhyun, lo conocía bien a pesar de
todo, y sabía lo que quería.
- Kyuhyun...
- Sí?
- Quieres
dormir conmigo?
- Aish, otra
vez con miedo, Sungmin? Está bien... pero que no se vuelva a repetir. - Escuché
cómo Kyuhyun se levantaba de su cama enseguida, y yo sonreí, sabía de sobra que
eso era lo que él quería, y aunque en la oscuridad no lo pude apreciar, sabía
que Kyuhyun también estaba sonriendo triunfante.
Las camas
del hotel eran más pequeñas que las del colegio, los dos entrábamos, pero mal,
aunque no era incómodo en absoluto, estoy seguro de que él había extrañado
tanto como yo esos momentos.
- Kyuhyun...
pareces incómodo... - le dije, y era cierto, no paraba de moverse seguramente
debido a que todavía llevaba la ropa del pub, que no estaba diseñada para ser
usada de pijama.
- Estoy
bien... - dijo refunfuñando.
- Si digo lo
que pienso va a sonar fatal... - susurré.
- Qué?
- Nada.
- Boh... -
se le veía realmente molesto, y aunque yo me estaba divirtiendo, viéndole
sufrir dentro de su carísima camisa negra, me empezaba a dar penita.
- Kyuhyun,
si te molesta, quítatelo... - susurré.
- Qué?
- Me has
escuchado perfectamente. - protesté.
- No será un
poco raro? - me preguntó, inseguro.
- No me
molesta, tranquilo. - también pensé que podría levantarse, ponerse un pijama y
volver, pero no dije nada.
Se incorporó
y se quitó la camisa, mis ojos acostumbrados a la oscuridad podían verlo
perfectamente.
- Qué estás
haciendo? - pregunté cuando escuché bajo las sábanas el sonido de su cinturón
desabrochándose. Aquello ya me frenaba un poquito más...
- Es que...
- Qué?
- Pican...
Son nuevos y... - parecía que estaba lloriqueando como un niño que no quiere
ponerse el jersey que le ha hecho su abuela, me pareció realmente divertido.
- Está
bien...
Se quitó los
pantalones, los lanzó contra la pared con ansias de venganza y se recostó en la
cama.
- Te he
echado de menos... - susurró un rato después, seguramente creía que yo estaba
dormido.
Me giré sin
decir palabra en la cama, acurrucado contra la pared de cristal, le podía ver
con los ojos entrecerrados mirándome con ternura sin que él supiese que yo
estaba despierto.
- Mírate...
no has cambiado ni un poco... - alargó su brazo hacia mí, acariciándome con
ternura la cara, y depositando besos suaves por mi rostro. Yo apenas podía
seguir ocultando la sonrisa.
Me rodeó la
cintura con su brazo, acercándome lentamente a él, seguramente con miedo a
"despertarme", y unos segundos después, me vi apoyado en su cálido
pecho, sintiendo cómo mi propio cuerpo subía y bajaba al ritmo de su
respiración.
- Te quiero,
Sungmin... Te quiero tanto... - me acariciaba cuidadosamente, como quién toca
una pieza a escondidas en un museo, y yo muriéndome de felicidad, me dejaba
hacer, cada vez más recostado encima suya.
Al final de
la noche, yo estaba completamente recostado encima de él, al más puro estilo
koala, sintiendo la calidez de su piel directamente sobre la mía, su suavidad,
su perfección... casi la había olvidado. Y las luces de Seúl bailaban sobre la
pared que yo tenía delante, haciendo movimientos que las hacían parecer peces
de colores en un océano oscuro.
-Fin-
¡Me encantó!
ResponderEliminar*__________*
Menos mal que se reconciliaron... pero necesito saber el motivo de Kyuhyun >.<
Muchas gracias ^^
EliminarEl motivo de Kyuhyun y todas las aclaraciones relacionadas con el Kyumin serán aclaradas muy pronto, gracias por leer y esperamos que sigas haciéndolo ;)
Yeobo! Al fin lo publicas, y como por fin se han reconciliado comentaré el capitulo. Simplemente increíble, me he emocionado en tantas partes, en tantas, las lágrimas me caían por momentos tanto que casi ni podía ni leer, cuando kyuhyun lloró en el baño, cuando Sungmin gritaba su nombre, cuando Kyuhyun le dijo a Sungmin que el estaría para protegerlo... dios, en serio que me emociono demasiado, un capítulo grande, enorme, lo estaba deseando, la espera mereció la pena...
ResponderEliminarKyuMin <3
Sé que llevabas tiempo esperando la reconciliación... Por fin ha llegado! XD jajajajaja lloraste de nuevo? Siempre lloras cuando lees el kyumin, tendrías que ir al médico o algo, a lo mejor es alergia (?)
EliminarPero bueno, gracias por leernos siempre, por las ideas de bombero y por ser nuestra fan más obsesa-loca-adicta-enfocada :)
Esperamos que nos sigas leyendo!! ;)
DIOS!No me podes dejar así!Me encanta esta historia :D Hiciste que mis sentimientos varíen desde alegria y felicidad hasta tristeza e ira y todo en el mismo capitulo xD. Cuando vas a publicar un nuevo cap noona? Estoy muy entisiasmada! Fighting~
ResponderEliminarHola Anónimo! ^^
EliminarMe alegra mucho que te haya gustado tanto :D
Nona! Oinsh, es la primera vez que me lo llaman! >///< Qué ilusión! (?)
Los nuevos capítulos de Kyumin serán publicados muy pronto, muchas gracias por leernos y sigue pendiente del blog! ^^