Abrí los ojos cuando noté el móvil vibrar bajo mi mano. Nos
habíamos quedado dormidos de nuevo? Alcancé el aparato que zumbaba incansable
con un vago gesto y miré la pantalla, incorporándome de inmediato.
- Kyuhyun, despierta! - Chillé sin delicadeza ninguna,
recolocándome el albornoz que tras mi no tan breve siesta mañanera había cogido
una forma un tanto abstracta.
- Qué pasa? - refunfuñó vocalizando mínimamente mientras se
desperezaba y me miraba con un ojo medio abierto.
- Nos hemos dormido! - recorrí la habitación en busca de mis
cosas, que obviamente no encontré. Esa no era mi habitación.
- No me digas... - ironizó estirándose sobre la cama.
- Tengo doce llamadas perdidas de Donghae, y cinco mensajes! Deben
de estar histéricos buscándonos. - le dije mientras entraba en el baño a por la
ropa que Kyuhyun me había dejado la noche anterior y que debía ponerme para ir
a mi cuarto a por una que fuese más... de mi talla.
- Sí, seguro que se han esforzado muchísimo buscándonos.
Apuesto a que han mirado en toda clase de lugares! Menos en mi cuarto... Son
detectives con talento. - puso los ojos en blanco riendo e incorporándose de la
cama. Su ironía mañanera me estaba poniendo nervioso.
- Sí, tu ríete. Pero la bronca que nos va a tocar va a ser
de campeonato... - le dije pasando por delante de su cama a saltitos mientras
me ponía el calcetín que me faltaba. - Vuelvo ahora.
- A dónde vas? - me miró burlón. Seguramente porque lo de
hacer tres cosas a la vez no era lo mío, y entre que me acababa de dar cuenta
de que llevaba los pantalones al revés, el calcetín a medio poner e intentaba
leer los mensajes mientras reñía a Kyuhyun por su lentitud, aquello era digno
de club cómico.
- A mi cuarto, necesito ropa. - Su mirada cambió y dejó su
pereza mañanera para avanzar hacia mí a máxima velocidad. Me agarró de la
muñeca y me giré con expresión frustrada, llegábamos MUY tarde a cualquier acto
que hubiese estado planeado para esa mañana, y Kyuhyun estaba posesivo? Ahora?
- No vayas.
- Kyuhyun... necesito ropa! No va a pasar nada, seguro que
Zhoumi está con los demás.
- Y yo te apuesto a que está esperando en esa habitación.
Suspiré y conseguí soltarme de su agarre, mientras buscaba
su mirada para transmitirle tranquilidad. Le notaba tenso y nervioso,
seguramente tenía miedo por mí, pero yo no era ningún bebé, y ya iba siendo
hora de que aprendiese a defenderme por mí mismo.
- Kyuhyun... - le susurré acariciándole la mejilla con
expresión dulce, haciendo que destensara un poco la mandíbula. - Estaré bien,
vale?
Negó con la cabeza y bajó la mirada.
- Déjame ir contigo.
- Volveré en seguida, voy a la habitación de aquí al lado,
no al otro extremo del mundo. -sonreí negando con la cabeza.- Vamos a hacer una
cosa... - levantó la mirada aún serio. - si no estoy de vuelta en cinco
minutos, ven a buscarme, vale?
Kyuhyun me observó cerrar la puerta tras de mí, sabía que no
le había dejado muy convencido, pero tampoco quería depender de él hasta para
ir a buscar un muda limpia a mi equipaje.
Por fin llegué al cuarto donde la noche anterior había
pasado una de las peores experiencias de mi vida. Dudé entre si llamar o abrir
directamente, al fin y al cabo la llave aún la tenía...
Decidí finalmente abrir y aventurarme al oscuro desorden que
reinaba en ese cuarto. Zhoumi había cerrado todas las persianas a cal y canto y
no se veía absolutamente nada. Caminé a ciegas procurando no pisar nada
desconocido cuya forma mi horrorizada imaginación pudiese deformar y
transformar en una criatura espantosa que me tragaría de un bocado. "Muy
maduro Sungmin", pensé para mí mientras avanzaba con los brazos extendidos
para no chocarme contra una pared y perder lo poco que me quedaba de
consciencia. Por fin alcancé el interruptor de las persianas, y lo pulsé para
que se levantasen. Un alivio interior me invadió cuando poco a poco pude
empezar a distinguir los muebles y demás objetos de la estancia.
- Nunca creí que tardarías tanto... Te has dormido,
Sungminnie? - Un escalofrío me recorrió la columna de arriba a abajo, y me giré
con expresión de horror, encontrándome a Zhoumi en su cama, sentado cruzado de
piernas y brazos, con aquella fea herida en el labio que Kyuhyun le había hecho
en su ataque de furia y su imborrable sonrisa fría y falsa.
- Zhoumi... - susurré inmóvil. Me sentía helado, no esperaba
encontrármelo allí. - Qué haces aquí? Deberías estar con los demás...
- Ah... Ya veo... - Se levantó despacio, muy despacio,
mientras reía entre dientes en un tono agudo. - Tardaste tanto para no tener
que verme? Eso me duele Sungmin... - Avanzó hacia mí a la misma velocidad que
su manera de levantarse, parecía sin fuerzas y si no fuese imposible, diría que
hasta parecía más delgado, marchito...
Armándome de valor, salí de su camino, seguido de su mirada,
y avancé hasta mi equipaje, que afortunadamente aún no estaba deshecho. Cerré
la maleta sin quitarle la vista de encima a Zhoumi, quien rió de nuevo al darse
cuenta.
- Vamos Sungmin... Tanto miedo me tienes? - se encogió de
hombros y yo le ignoré. Localicé con la mirada la ropa que había usado la noche
anterior y que estaba esparcida por el cuarto, acercándome para recogerla
cautelosamente, y más de lo que me habría gustado hacerlo, a Zhoumi. Noté un
suspiro a mis espaldas cuando alcancé mis pantalones, y me giré rápidamente,
por precaución, para ver dónde estaba Zhoumi. Estaba tirado encima de la que
era mi cama, no parecía muy saludable, ya lo había dicho, pero me parecía
imposible que alguien pudiese ponerse tan enfermo como él lucía en tan sólo una
noche.
- Zhoumi...? - murmuré algo preocupado. Sé que en teoría
debería haber cogido mis cosas y salir escopeteado de allí sin mirar atrás,
pero como ser humano que soy, me daba reparo abandonar a alguien que parecía
tan... bueno... no sé muy bien como describirlo.
- Te acuerdas de mi nombre!- rió débil y sonrió. - Estás
tardando mucho en irte, Kyuhyun va a preocuparse.
"Cierto, Kyuhyun..." miré el reloj del móvil, aún
me quedaba un minuto y medio para que apareciese mi novio histérico en plan
Rambo y arrasando con todo a su paso. Dirigí de nuevo mi mirada a Zhoumi y
solté la ropa acercándome a él bajo su mirada atenta y un poco desconcertada.
- Sungmin? - murmuró cuando me arrodillé al lado de la cama
y le puse la mano en la frente.
- Calla. Y no te muevas ni intentes nada porque me largaré
por esa puerta. - le miré amenazante, intentando que no notase mi pánico
interior y me centré en su temperatura; estaba ardiendo. - Tienes fiebre.
Estabas enfermo antes?
Negó con la cabeza muy quieto, obedeciendo.
- Dormiste? - pregunté mientras iba hacia mi maleta,
abriéndola buscando el neceser. Había traído algunas medicinas... no recordaba
bien si alguna para bajar la fiebre.
- Sí... - le miré incrédulo y retiró la mirada. Vale, no,
era obvio que no había dormido. La culpa había sido mía por preguntar.
- Sungmin! - Kyuhyun apareció por la puerta a la velocidad
de un rayo. - Qué demonios estás haciendo? Por qué tardas tanto?
Miré el reloj de nuevo y sonreí. O había cronometrado los cinco
minutos o aquí algo fallaba...
- Zhoumi está enfermo. - respondí centrándome en los
prospectos de las pastillas bajo la mirada incrédula de Kyuhyun. Le miré, no
era normal tanto silencio, y le vi mirándome con los ojos abiertos como platos.
- Qué?
- No, qué tu! - Kyuhyun chillaba histérico mientras miraba a
Zhoumi amenazante para que dejase de reírse. - No te lo creas! Es un truco! Has
tardado tanto sólo para intentar curar a
esta cosa?
- Tiene fiebre... - murmuré dejando ya el tercer papel y
empezando a leer el cuarto. Había traído pastillas para todo menos para bajar
la fiebre? Bien.
- Qué va a tener fiebre! - Kyuhyun se acercó a Zhoumi con
una ceja enarcada y le posó una mano en la frente con tanta fuerza que pareció
más un intento de, perdón por mi falta, ostia con toda la mano abierta, que un
intento de medirle la temperatura. Zhoumi cerró los ojos con un gesto de dolor
y yo miré a Kyuhyun con desaprobación, quién me ignoró completamente y se
volvió hacia su hermanastro.
- Yah... Tú... Cómo has hecho para subirte la temperatura? -
le preguntó fríamente.
- Estoy bien... es la enfermera esta que tiene ganas de
cuidar a alguien. - rió y Kyuhyun me miró con la mandíbula tensa y los puños
cerrados. - Sungmin, vámonos o yo sí que le voy a dar fiebre.
Le ignoré y entré al baño, llenando una pequeña palangana
con agua fría y mojando una toalla en ésta.
- Esto... me estás escuchando? - tras observar mi indiferencia
a sus órdenes, avanzó él mismo hacia mi equipaje y cuando hacía ademán de
tomarlo le frené.
- Kyuhyun. - Dije con calma escurriendo la toalla y
colocándosela sobre la frente a Zhoumi. - Como no sueltes mi equipaje ahora, te
lo tragas. - Le dediqué una mirada dulce y una sonrisa que hicieron que
enseguida lo soltase y se sentase en la cama de Zhoumi mientras me miraba con
desaprobación. Yo sé que Kyuhyun no entendía por qué estaba haciendo esto, pero
ahora no podía explicárselo. Por muy mal que Zhoumi me hubiese tratado la noche
anterior, había sido él quien me había consolado durante tantos meses de
tristeza absoluta, quien me había animado a sonreír y a continuar pasase lo que
pasase, y aunque todo hubiese sido por la estúpida competitividad entre
hermanos, yo no podía dejar a alguien enfermo que cuando yo lo estuve, me
cuidó.
- Sungmin... - Zhoumi me sujetó la muñeca, haciendo que
Kyuhyun se incorporase al más puro estilo perro guardián y le mirase cual
asesino. - Está bien... iros.
Me zafé, inexpresivo, y continué mi tarea.
- Sungmin... - esta vez me llamó Kyuhyun. - El móvil lleva
vibrando desde hace un buen rato... Deben estar preocupados, vámonos.
Le miré incrédulo. - De verdad piensas dejarle solo en su
estado?
Kyuhyun me miró, luego miró a Zhoumi y luego volvió a
mirarme a mí. Suspiró y se levantó saliendo del cuarto.
- Voy a hacer unas llamadas, vuelvo ahora. - Cerró la puerta
y yo volví a sentirme desprotegido, pero no dejé que Zhoumi lo notase.
- Lo siento. - Me quedé inmóvil al escuchar esas palabras.
Qué había dicho? Se acababa de disculpar? No sabía si sentirme furioso o
complacido. De verdad creía que un simple "Lo siento" podía
solucionar algo? No era el mismo caso que Kyuhyun, Kyuhyun no me había
destrozado el cuerpo ni había intentado violarme por un estúpido juego.
- Ya. Cállate. - Le dije, frío como el hielo. No tenía
ninguna intención de simpatizar con él, simplemente haría que su fiebre bajase
y me largaría a disfrutar mi excursión.
La puerta se abrió y entró Kyuhyun, acercándose a mí y
acariciándome la cabeza con una expresión tierna que le cambió en cuanto posó
sus ojos en el enfermo.
- A quién llamaste? - Pregunté sentándome de otra forma. Me
empezaba a doler la espalda.
- Primero a los profesores, para que no se preocupasen y
supiesen de la situación. - Le miré con pánico.- Sungmin, no conté detalles,
sólo les dije que Zhoumi estaba enfermo con fiebre, dijeron que enviarían a
alguien. - Suspiré aliviado. - Luego llamé al colegio para informar de que
Zhoumi vuelve para allí por enfermedad y después llamé a mis padres. Si esto es
grave debe volver a casa.
- Kyuhyun, es fiebre, no un virus africano. - le dije frío.
Me parecía un poco excesivo que Kyuhyun mandase a su hermano a casa por la
fiebre.
- No lo has entendido. - sonrió a Zhoumi en la cama de forma
fría y falsa, tal y como él solía hacerlo. - Quiero que se vaya a casa.
Zhoumi resopló y miró por la ventana. No iba a protestar?
Siempre solía tener la última palabra y no se iba a dignar a decir nada?
Kyuhyun pareció sorprendido por el mismo motivo.
- No vas a quejarte? Ni a reírte porque sabes que podrás
evitarlo de alguna forma retorcida que solamente a ti se te ocurriría? - le
preguntó.
Zhoumi sonrió con cansancio y cerró los ojos negando con la
cabeza.
- No. - Abrió de nuevo los ojos, y después de mirarme a mí,
miró a Kyuhyun con una expresión que... podría describirse como... dulce y
triste? Algo raro le pasaba a ese muchacho, la fiebre le hacía cambiar?-
Supongo que he perdido.
Kyuhyun tragó saliva, sorprendido, al igual que yo, que le
miré de la misma forma. Dirigió su mirada a mí y se levantó acercándose y
sentándose a mi lado.
- Admites... la derrota? - le preguntó incrédulo.
Zhoumi sonrió a modo de respuesta y no respondió nada más.
Supongo que ya le había costado bastante rendirse como para herir su orgullo de
nuevo y repetir esas palabras.
Durante la hora siguiente, nadie dijo nada, Kyuhyun había tomado
mi lugar en el cuidado de Zhoumi al verme a mí cansado, y yo no sabía qué
decir, así que simplemente guardé silencio.
A continuación, tras una hora de silencio absoluto, llamaron
a la puerta. Al abrir, dos personas entraron en la habitación sin permiso.
Kyuhyun parecía conocerlas, yo en absoluto,
- Buenos días. - saludaron educadamente a Kyuhyun y a
continuación a Zhoumi.
- Ya saben lo que tienen que hacer... - respondió Kyuhyun
incorporándose. - Diagnostíquenlo y después llámenme.
Aprovechando mi confusión y que no estaba en condiciones de
protestar, tomó mi equipaje en una mano y con la otra me agarró, sacándome a
rastras del cuarto y dejando a Zhoumi con esos extraños.
- Kyuhyun, quiénes son? - pregunté cuando ya estábamos en su
cuarto y él depositaba mi equipaje con cuidado en el suelo, abriéndolo para mí
e invitándome a coger mi ropa para cambiarme.
- Los médicos de la familia. - Respondió como si fuese lo
más normal del mundo.
- Pero... yo creía que vivías realmente lejos! Cómo han
podido llegar a Corea tan rápido? - pregunté agachándome al lado de mi maleta y
escogiendo un conjunto.
- Tenemos médicos por todas partes, son como una especie de
cadena de clínicas médicas, cada ciudad tiene una... No sé muy bien cómo
funciona, sólo sé que llamo y vienen. - rió y se dirigió a su armario para
cambiarse él también.
La familia de Kyuhyun tenía tanto dinero como para tener a
su completa disposición a tantos médicos alrededor del mundo? Eso me hacía
sentir un poco presionado... Su familia tenía tanto poder y mi madre era
profesora de primaria mientras que mi padre tenía una carnicería... Igualito.
- Qué le va a pasar a Zhoumi? - pregunté apartando la mirada
de Kyuhyun en cuanto me di cuenta de que se estaba desvistiendo como si nada
delante mía. Sí, lo sé, después de un año juntos debería de estar más que
acostumbrado a verle, pero yo cada vez que se quitaba una prenda me sentía como
una colegiala nerviosa que ve por primera vez a un chico desnudo. Era el "efecto
Kyuhyun", como me había acostumbrado a nombrar el efecto que este hombre producía
en mí.
- Pues que supongo que abandonará el colegio... No estoy
seguro, pero por su orgullo, dudo que vaya a quedarse. - comentó mientras se
ponía una camiseta blanca.
- Perderá todo el curso? - pregunté mientras yo dudaba si
desnudarme allí o irme al baño. Yo no era tan seguro e inconsciente como
Kyuhyun, siempre le daba mil vueltas a las cosas.
- No te preocupes, es inteligente, sabrá recuperarlo vaya a
donde vaya, y si no siempre puede tomar clases en casa. - rió al girarse y
verme indeciso sentado al lado de mi maleta. - Te da vergüenza? Cuántas veces
te he visto desnudo? Cientos? - hice un puchero ante su burla. Siempre se reía
de mi vergüenza, pero de lo que él no se daba cuenta es de que siempre que yo había
estado desnudo delante suya, era porque él mismo lo había hecho con sus propias
manos, no por mi iniciativa propia.
Se acercó a mí sonriéndome y se sentó detrás de mí
colocándome entre sus piernas cuidadosamente y rodeándome con ellas,
abrazándome por la cintura y apoyó su cara en mi espalda.
- Extrañaba mucho esto... - susurró sobre mi cuello mientras
mi rubor ascendía de tonalidad, pasando de un rosáceo claro a rojo carmesí.
Esto empeoró, claramente, cuando Kyuhyun tiró de mi camiseta hacia arriba
haciendo que sintiese sus manos sobre mi cuerpo directamente, sin tela de por
medio. Eso no era bueno, llevaba muchos meses necesitado, y ahora mismo todo mi
cuerpo era una prueba de ello. Ahora ya no era solo mi color lo que subía, la
temperatura le acompañaba y yo cerré los ojos, sintiendo sus manos por mi
cuerpo.
Yo ya empezaba a montarme mis fantasías mentales, demasiado
explícitas (a la par que obvias) como para describíroslas, cuando noté cómo
Kyuhyun alcanzaba mi camiseta de la maleta y como si fuese un bebé, me la ponía
con cuidado, girándome entre sus piernas y dándome un tierno (y nada
satisfactorio) beso en la frente. Le miré incrédulo. Eso iba a ser todo? Mi
novio al que yo ya daba por adicto a los tocamientos excesivos simplemente me
iba a dar un beso en la frente? Después de cinco meses a pan y agua? En serio?
Estaba realmente descolocado, y más cuándo se incorporó, desapareciendo en el
baño y diciéndome tras la puerta cerrada: - Avísame cuando estés y salgo.
Miré a la puerta con la boca abierta. Y repito de nuevo: en
serio? No me lo creía, estaba convencido de que en algún momento, cuando me
quitase los pantalones, Kyuhyun saldría de la puerta para que ambos
hiciésemos..." eso que hacen las parejas" después de tantos meses.
Pero no, me equivocaba, me quité los pantalones y esperé como unos tres minutos
mirando a la puerta, me quité con algo más de reparo los slips y esperé otro
tanto, y nada. Qué era esto? Ahora iba a ser yo el que tenía que pedir esa
clase de cosas? Sé que hace unas horas le había dejado claro que nada de skinship , pero había cambiado de
opinión, y él debería haberlo notado cuando me dejé sobar y desnudar por él sin
queja ninguna! Pues nada, lleno de frustración me puse unos slips nuevos y unos
vaqueros, pataleando silenciosamente y maldiciendo la estúpida mente monocelular
masculina, incluyendo la mía.
- Ya estoy listo. - dije secamente mientras me ataba las
deportivas con el ánimo por los suelos. La puerta del baño se abrió acto
seguido y Kyuhyun salió sonriendo. "Ya, tú sonríe..." le miré con
cara de mala leche y le di mi mochila con un gesto brusco para que la llevase.
- Vámonos. - Salí de la habitación aún de morros y seguido
por Kyuhyun, que me miraba confuso y sin saber muy bien qué hacer o decir.
- Estás enfadado? - me preguntó ya en la calle mientras me seguía.
- No, por qué? Debería? - respondí secamente mientras
caminaba a grandes zancadas.
- Pues ahora no estoy tan seguro... - respondió en un
murmuro. Caminamos otros cinco minutos en silencio. A Kyuhyun y a sus malditas
largas piernas no les costaba nada seguirme el ritmo, que según mi perspectiva,
era bastante rápido, así que caminaba a mi lado mientras me mantenía bajo su
mirada, intentando leerme la mente.
- Sungmin... - se atrevió a preguntar por fin. - Sabes a
dónde vamos?
Frené en seco y miré a mi alrededor. No, ni siquiera sabía
dónde estaba, me había centrado tanto en mi indignación personal que ni me
había fijado por dónde íbamos.
Di vueltas sobre mí mismo, estaba en una especie de
parque... Y no había nadie... Nos habíamos perdido en un parque, qué triste.
Caminamos por el lugar, era bastante bonito, había un lago
en el centro y estaba muy limpio, había pececitos naranjas nadando tranquilamente
y un puente que lo cruzaba de un lado a otro. Hacía un día soleado, así que eso
sólo hacía más bonito el lugar, completamente verde, con árboles para dar
sombra y claros de sol entre éstos. No pude evitar sonreír, jamás pensé que en
una gran ciudad como esa pudiese haber un sitio así, y completamente vacío.
Finalmente, suspiré y recordé que no estábamos solos en el
mundo, y que nuestros compañeros y profesores deberían de estar todavía
esperándonos, así que saqué el móvil con intención de llamarles, pero cuando
les iba a llamar, Kyuhyun me quitó el móvil y se lo guardó en su propia
mochila. Le miré sorprendido.
- Qué haces? Tenemos que llamarles y decirles que nos hemos
perdido.
Sonrió y negó con la cabeza.
- Quedémonos aquí, quiero que estemos a solas, y este sitio
es perfecto... - susurró mientras me acariciaba la mejilla con una mirada tan
dulce que podría haberme derretido allí mismo. No pude reaccionar por culpa del
"Efecto Kyuhyun" así que simplemente asentí como un bobo y le seguí
hasta la sombra de un grupo de árboles, dónde mi novio se tumbó, utilizando la
mochila como almohada. Le observé. En aquel medio, sin nadie alrededor, su
blanca piel en contraste con el verde intenso del suelo y completamente inmóvil...
era lo más hermoso que podía existir. Los rayos del sol que se filtraban entre
las hojas de los árboles descansaban en su pelo creando reflejos de color
caoba, casi rojos, y yo, mientras todo esto sucedía a mi alrededor, le miraba
embobado.
- Sungmin? - Desperté de mi sueño, siendo por fin consciente
y pudiendo cerrar la boca que estaba en una forma perfecta de "O".
Kyuhyun me observaba sonriente y con un gesto, me invitó a tumbarme a su lado,
por supuesto, obedecí.
Recostado a su lado, utilizando su brazo como almohada,
sonreí feliz, estaba completamente pegado a su cuerpo, por lo que no sentía
nada de frío, su cuerpo emitía un calor de lo más agradable, y a mí solo me
faltaba ponerme a ronronear. De pronto, sus brazos me rodearon la cintura,
haciéndome abrir los ojos que en algún momento había cerrado, haciéndome girar
sobre mí mismo hasta tumbarme encima suya. Yo, completamente sonrojado, sonreí
como un idiota de nuevo, entre sus brazos, encima de su cuerpo, era la cosa más
feliz del mundo. Me sentía protegido, a salvo, por mí podía destruirse el
planeta, que no me importaría mientras pudiese seguir descansando sobre su
pecho.
El viento me revolvió el pelo, pero Kyuhyun en seguida me
cubrió el rostro con una de sus grandes manos, protegiéndome como a mí me
gustaba.
-Sungmin... - susurró una vez que el viento se calmó y
simplemente volvía a correr una suave brisa- Dímelo.
Le miré confuso.
- A qué te refieres?
- Por qué te enfadaste antes? - me preguntó en otro susurro,
protegiéndome de nuevo cuando otra ráfaga menos suave de lo que ya estábamos
acostumbrados apareció.
Le miré sonrojado. No podía decírselo, pensaría que soy un
pervertido, un salido, alguien a quién solo le importa el sexo! Tragué saliva y
negué con la cabeza.
- No sé de qué me hablas. - "Bravo Sungmin, sigues
siendo tan brillante como siempre." me reproché. Kyuhyun sonrió y suspiró.
- Quiero que puedas volver a confiar en mí. Que si hay algo
que te molesta me lo puedas decir y así yo pueda cambiarlo. - le miré
derritiéndome por enésima vez en lo que iba de día. Claro que confiaba en él, a
pesar de todo seguía sintiendo que podía confiar plenamente en él. - Puedes
decírmelo?
- Si te lo digo... tengo miedo de que pienses que soy...
extraño.
- Extraño? - me miró incorporándose sobre sí mismo,
dejándome a mí sentado sobre su regazo y aún sostenido por sus brazos.
- Antes... cuando me... vestiste... - empecé a hablar
despacito y con timidez.
- Te molestó, cierto? - me preguntó en un tono de auto
reproche.
- No! - me apresuré en corregirle, no quería que se pensase
lo que no era.
- Entonces? - me miró de nuevo confuso.
- Me gustó... mucho... sentir de nuevo tus manos... lo
necesitaba. - susurré lo más bajito posible, pero él me escuchó perfectamente,
porque sonrió y también se sonrojó un poco.
- Y entonces por qué te enfadaste?
- Porque yo... - tragué saliva. - quería... más.
Kyuhyun pareció no comprenderme al principio, pero cuando
abrió la boca dispuesto a decir algo y nada salió de su garganta, me di cuenta
de que se había dado cuenta por fin.
- Querías...? esto... querías...? - él tampoco sabía cómo
aclararlo.
- Sí. - ese monosílabo fue lo único que dije y él suspiró
bajando la mirada.
- Yo también... - susurró y levanté la mirada sorprendido. -
pero creí que te asustarías.
Ante aquella situación lo único que pude hacer fue sonreír. Éramos
iguales, ambos nos habíamos necesitado mucho y necesitábamos una vía de escape.
Nos miramos a los ojos sin borrar la sonrisa y Kyuhyun, se acercó a mis labios,
besándome con ternura y lentitud. Yo correspondí rodeándole el cuello con ambos
brazos y pegándome completamente a su cuerpo, como si fuésemos uno.
"Lo necesitaba..."
-Fin-
Gracias por leernos! ^^
EliminarWaa!!! que lindo capii :3 siguelo <3
ResponderEliminarGracias por comentar y por leernos! Ahora mismo estamos de exámenes y nos es un poco difícil tener tiempo para nuestro Kyumin... Pero muy pronto estará el siguiente episodio!
EliminarDe nuevo, gracias por leernos. Continúa haciéndolo! ^^
Adoto tus capitulos *u* <3
ResponderEliminarOinsh!Muchas gracias!! Espero que nos sigas leyendo ;D
EliminarQue lindo capitulo !! :3 espero con ansias la continuación lo haces muy bien :D <3
ResponderEliminarMuchas gracias!! Esta semana publicaremos el nuevo capítulo! ;D
EliminarAmo tu fic enserio !! *.* espero que continúes :)gracias por tu esfuerzo c:
ResponderEliminarMuchísimas gracias! Claro que continuaré, esta semana publicaremos esta semana el último capítulo :D
EliminarAme tú fic, espero el próximo capítulo!!!!!
ResponderEliminarMuchas gracias! ^^
EliminarPronto lo publicaremos :D
Demasiado bueno este fic!!! No me dejen con la intriga me encanta continualo por favor!!!
ResponderEliminarMuchas gracias!! ^^ Me alegro de que te guste y, sí, pronto publicaremos el capítulo 25 :D
EliminarUn saludo~ <3
awwwwwwwwwwwww!!!♥♥ lo amé!!!
ResponderEliminares hermoso~ *-*
estaré esperando el prox. capitulo nee?
Muchísimas gracias! ^^♥
EliminarTranquila, no tendrás que esperar mucho, lo prometo~
Espero que nos sigas leyendo y gracias por comentar!!^0^/♥
Hola(?) Te contaré mi historia es super lol~
ResponderEliminarEstaba en la noche super aburrida y buscando algunos buenos
shots' en el celular y puse "KyuMin celos" y este me apareció
como de los...terceros o algo así. Me puse a leerlo y noté
que no era un shot, era un seriado ;_; Odio seguir seriados por que quedo como "kajshdfkals D:!" y me desespero. Me falta paciencia u-u~ En fin. ¡ME ENCANTÓ! *^* Escribes precioso mujer y sufri mucho con esto xD♥♥ Aun así, ojala actualices pronto ¿nee? ¡Besos!~♥♥♥
Oooooooh :')
EliminarEs una historia preciosa!! Haré un fic de ella (?) xD Oye.. quien sabe? jajaja
En serio, muchas gracias por leernos y por seguir el blog!
Esta semana publicaremos el capítulo 25 ^^
Un saludo y un besazo! :D
<3