1 de julio de 2014

[KyuMin] Strangers: Capítulo 3: Friends. CANCELADO

- Te parece bonito? Colgarme así? A mí? A tu mejor amigo? – Puse los ojos en blanco mientras esperaba a que el semáforo se pusiese en verde.
- Ya te he dicho que se me cayó el móvil al suelo y no encendía… - Intentaba calmar a Henry, al que le encantaba montarse un drama él solito por la mínima. – Además, me encontré con un antiguo compañero de clase y tenía que saludarle.
- No me podías mandar ni un WhatsApp para decirme que estabas bien? – Su tono de “estoy a punto de llorar, así que ruega clemencia” estaba en su punto álgido.
- Lo siento…
- Mientes.
- No lo hago… - Por fin el muñequito verde se dignó a aparecer y yo, junto a la marabunta de personas que había a esas horas por el centro, cruzamos la calle a paso ligero. – Dónde estás? Vamos a tomar algo, anda.
- Claro, no hay dinero para un hotel decente, pero para ir a tomar algo sí?
- Exactamente.
- Aish…

- Voy a entrar al metro ya, así que dime dónde estás y te iré a buscar.
- Estoy en una plaza con una estatua gigante de un señor con barba… El mismo que aparece en los billetes. – Suspiré y reí con resignación. Era un turista de estos que se sacaban fotos con los monumentos para luego volver a su país sin ningún tipo de conocimiento sobre ellos.
- Está bien… No te muevas!
- Aquí te espero, cielo. – Su tono meloso me hizo fruncir el ceño.
- Henry… Sabes por qué te llamaban gay en la universidad?
- Oh, vamos! Era una broma! Qué insípidos sois todos en este país…- Suspiré de nuevo y colgué para orientarme con el mapa, coger la línea acertada y salvar a Henry. Porque sí, sentía que si yo no estaba a su lado corría peligro… De hacer el ridículo más espantoso a la mínima.
- Minnie! Aquí! – Me puse las gafas de sol y le sonreí. Él me saludaba con entusiasmo desde la sombra de un árbol, sosteniendo miles de folletos de propaganda distintos. – Mira lo que tengo! Con este de aquí nos hacen un cinco por ciento de descuento en un cubo de pollo de doce piezas! Y con este, si pedimos cuatro pizzas medianas, la quinta nos sale gratis!
Le miré, exasperado. – Henry… Recuerda que no vivimos aquí. No nos sirve de nada… Cómo vamos a comernos cuatro pizzas nosotros solos?
- En una emergencia podemos guardarlas para los dos días siguientes! – Puse cara de asco. – Qué? Aigoo, qué modosito! Mira, en Canadá, pedíamos una pizza grande por cada dos personas, y si sobraba? Se desayunaba al día siguiente! Y si seguía sobrando? Se comía al mediodía!
- Luego los raritos somos nosotros…
- Coméis col pocha!
- Kimchi!
- Pues eso.
- Aish…
Le obligué a tirar los folletos de propaganda en una papelera, cosa que no fue fácil, y lo arrastré hasta una cafetería cercana para tomar algo.
- Quieres un gofre? – Le miré, y ya parecía habérsele pasado completamente el enfado. Miraba el muestrario de la cafetería, lleno de galletas y pasteles varios, como si fuesen sus propios hijos.
- Mucho. – Musitó, relamiéndose. Sonreí y pedí dos con helado de chocolate junto a dos cafés con hielo. El verano en Seúl no era ninguna broma, y menos después de salir de un metro atestado de gente.

- Entonces… - Tragó de un bocado la mitad de su gofre y me miró, con cara de auténtico placer. Me aguanté las ganas de reír para que no se me saliese el café por la nariz. – La entrevista, aparte de tus teorías conspiratorias, fue bien?
- No son teorías conspiratorias! Estoy seguro de que alguien me miraba desde la ventana! Sabes que nunca me equivoco en estas cosas… Cuando me siento observado es por algo! – Asintió, dándome la razón como si estuviese loco. – Aish… Sí, supongo que fue mejor de lo que esperaba.
- No fue un absoluto desastre?
- Exacto. Tuve suerte de que Changmin no puso a prueba ni mi chino ni mi francés, sino el inglés y el japonés.
- En esos dos vas sobrado!
- No exageres… El japonés sí, pero el inglés… Mi pronunciación es un poco mala.
- Te digo yo, Canadiense, que es espantosa, pero por lo menos utilizas bien la gramática, y sabes pronunciar la “f”, así que… Ya es algo.
- Gracias… Creo. – Sonrió y continuó comiendo como si se le fuese la vida en ello.
- Créeme, en un país que pronuncia Tipany en vez de Tiffany, es algo que no se encuentra siempre. – Reí y asentí.
- Sé que las Tiffanies de por ahí me lo agradecen… - Rió y asintió. Hablar con Henry era divertido y fácil, por eso nos habíamos hecho tan amigos. Yo era algo tímido, pero él era la cosa más extrovertida que había visto desde Heechul Hyung.
Además, cuando había alguna situación grave, sabía tomarse la situación con la madurez necesaria… La lástima es que era él mismo quien juzgaba la gravedad de las situaciones, por lo que no era muy común verle tomar el papel del chico de veintitrés años que, en teoría, es.
- Deberíamos de ir al hotel? – Dije, después de dejar propina sobre la mesa. Me miró con ruego en sus ojos.
- Minnie… No me odies… Vamos de paseo, sí?
- Pero es que ya es tarde! No estás cansado?
- Echo polvo, pero no quiero volver a ese picadero de lentejuelas…
- Entonces qué hacemos? – Se encogió de hombros y en ese momento, saqué la cartera y localicé la tarjeta que Siwon me había dado unas horas antes. – Espera, que tengo una idea para no torturarte más por hoy.
Me dedicó la más dulce de las sonrisas y reí mientras me disculpaba para ir a llamar.

- Diga?
- Siwon!
- Oh! Sungmin! Ya creí que no me llamabas… - Reí. Solo pasaban veinte minutos de las ocho, pero Siwon y la puntualidad siempre habían ido ligados en la misma frase.
- Lo siento, estaba tomando algo con un amigo.
- Está bien, está bien. – Le sentí sonreír al otro lado del teléfono. Muy buenos recuerdos del colegio se amontonaban en mi cabeza y me sentía feliz. – Quieres que quedemos para ir a cenar? Conozco muy buenos restaurantes donde me harán un hueco con solo ver que me acerco con el coche.
Suspiré y negué con la cabeza sin poder dejar de sonreír.
- Yo prefiero barbacoa y soju, la verdad. – Rió escandalosamente.
- Claro, también es una opción. Hay una señora que tiene una carne estupenda.
- Se me hace la boca agua con solo escucharte.
- Te mando la dirección en un mensaje y nos vemos allí en media hora?
- Si no se atrasa el metro, allí estaré.
- Quieres que te vaya a buscar?
- No, déjalo… Además, si Henry ve tu coche, seguro que luego no quiere volver a subirse en el metro, así que es mejor que no…
- Henry? Tienes perro? – Eché a reír mientras Henry salía en ese momento a la terraza de la cafetería y me miraba, confuso.
- A vece eso creo… Pero no, es un amigo que vino conmigo.
- Oh… Pues que se venga! Yo llevaré a Kibum, que está muy emocionado por verte!
- Y yo por verle a él!
- Hasta ahora, Min!
- Sí.
Colgué y miré a Henry, que me observaba con ojitos brillantes y la cabeza inclinada. Realmente parecía un cachorro.
- No tenemos que volver al hotel aún. – Le di unas palmaditas en la cabeza y él empezó a saltar, emocionado a más no poder.
- Bien! A dónde vamos? – En ese momento me llegó el prometido mensaje y asentí.
- No lejos, a cenar con unos amigos del instituto.
- Bien! Vamos entonces! – Sonrió con alegría y nos dirigimos hacia el lugar de encuentro.

- Lee Sungmin! – Gritó Siwon, levantándose de un salto en cuanto aparecimos en su campo visual.
- Choi Siwon! – Le devolví el ruidoso saludo mientras Kibum sonreía alegremente y se levantaba más lentamente. Siwon se acercó a grandes zancadas y nos unimos en un fuerte abrazo y risas joviales.
- Hola, Min! – Kibum llegó a nosotros y nos abrazamos, también! – Te veo bien, cómo te va?
- De momento no me puedo quejar… - Un carraspeó sonó a mi espalda y entonces recordé la presencia de mi mejor amigo. – Oh, sorry! – Reí y Henry les sonrió con dulzura, poniéndose a mi lado. – Este es Henry, un amigo de la universidad. Henry, estos son Siwon y Kibum, amigos del instituto.
Se dieron todos las manos y se saludaron con cortesía. Nos sentamos entonces en la mesa y pedimos comida y alcohol para un regimiento mientras comentábamos anécdotas.
- Sabéis algo de los demás? – Preguntó Kibum, sirviéndonos soju a todos.
- Sí! – Henry salió de la nada y todos le miramos, confusos. – Veréis, Heechul se mudó a china persiguiendo a Hangeng, Ryeowook le puso los cuernos a Leeteuk y ahora está con Yesung, mientras que Leeteuk está con Kangin. Shindong se casó con una periodista y… - Su voz fue deteniéndose a medida que nuestras expresiones de confusión se pronunciaban. – Qué?
- Tú cómo sabes todo eso? – Le dije, riendo. Siwon parecía sorprendido mientras que Kibum, perdido.
- Soy muy bueno escuchando y memorizando. Cómo te crees que me he sacado la carrera sin apenas estudiar? – “Cierto.”
- Es alucinante! Todos los nombres te sabes? – Asintió, sonriendo con orgullo, a la pregunta de Siwon. – Increíble…
- Qué estudiaste, Henry? – Preguntó Kibum, observándole con interés, como si fuese algún raro espécimen de mono.
- Mercados. – Respondió, centrando entonces su atención en la carne. La comida siempre sería su único y verdadero amor. Siwon y Kibum se miraron, intercambiando miradas que yo no pude descifrar.
- Comprendo… - Musitó Siwon. – Y… Decías que eras de Canadá?
- Toronto.
- Entonces sabes tanto inglés como francés?
- Sí, además de algo de español básico… Pero cuando me venga a vivir a Seúl con Minnie pienso buscar una academia. Los idiomas inflan un montón el currículum.
- Y ya has firmado algún contrato?
- Esté!? – Interrumpí, riendo. – Aún no ha repartido ni currículums! Está muy ocupado haciendo tartas y cosas varias.
- Oye! Pues bien que te las comes! – Replicó, mirándome con indignación.
- Siwon… - Kibum le llamó por lo bajo. – Por qué no… Ya sabes…
Siwon asintió y miró a Henry con expresión seria y segura. Hasta a mí me impuso. – Henry, no sé si te interesará, pero tengo un puesto vacante en las oficinas de aquí, en Seúl… Sería uno de director de sector, y buscamos a gente joven y con ganas, así que si te interesa…
Henry le miró con los ojos como platos y mi boca se empezó a abrir poco a poco hasta hacer una perfecta “O”. Su rostro se giró poco a poco hacia mí y me miró, completamente descolocado.
- Minnie… - Murmuró.
- Sí? – Susurré.
- Creo que no entiendo lo que me acaban de decir… - Tragó saliva. – Me lo explicas?
- Lo que te hemos propuesto, - interrumpió Kibum, mientras Siwon se reía. – es que formes parte de nuestro equipo. Tienes buena memoria y eres bueno recordando detalles, además de que, por lo que nos has dicho, obtuviste buenos resultados en tu máster, así que no tendría que haber ningún problema en ponerte al frente. Además, al principio tendrás ayuda hasta que aprendas como funciona todo por dentro…
- Si aceptas, claro. – Añadió Siwon, sonriéndole con alegría a mi pobre Henry, que parpadeaba sin parar, confuso a más no poder. Por suerte, yo desperté de mi incredulidad.
- Henry! A qué esperas! Di que sí! Es una oportunidad única en una empresa de renombre! – Henry me miró, parecía que iba a romper a llorar de un momento a otro.
- Sí! Sí quiero! – Se levantó de la silla de un salto y gritó como un loco, haciendo que todo el restaurante se girase hacia nosotros. Siwon y Kibum rompieron a reír mientras yo intentaba que se bajase de la silla o que, al menos, dejase de bailar sobre ella.
- Cuándo empiezo? – Dijo en cuanto se hubo sentado y calmado. Sonreí con ternura, a veces me sentía como su madre.
- Pues… Cuanto antes mejor. La semana que viene te va bien? – Me miró, como esperando a que yo respondiese por él.
- Qué?
- Qué dices?
- Yo?
- Ajá.
- Yo por qué?
- Porque yo no voy a venir si no vienes conmigo.
- No digas chorradas.
- No las digo.
- Vas a venir sí o sí.
- Depende. Ven conmigo.
- Henry, depende del trabajo.
- Pues entonces yo también espero.
- No vas a esperar a nada, firma ya.
- Firmar el qué?
- Yo qué sé? Una servilleta o algo!
- Esto… - Siwon nos interrumpió, mirándonos con confusión. – Hay algún problema?
- Minnie tuvo hoy una entrevista para Besthow Corporation y estamos pendientes de que le llamen o no para decidirnos.
- En Besthow!? – Preguntó Kibum, mirándome con sorpresa.  Asentí. – Wow… Es genial! No a cualquiera le hacen la entrevista… Son muy estrictos con los currículums.
- Y que lo digas… Y te lo digo yo, que trabajo con ellos en multitud de ocasiones. – Añadió Siwon, mirándome con admiración. – Es genial! Seguro que te cogen… Fuiste a la misma escuela que el jefe…
Parpadeé varias veces y le miré, sin entender.
- Qué?
- Kyuhyun vino a clase con nosotros, o ya no te acuerdas? Sungmin, salisteis juntos! – En ese momento, mi mundo entero se desplomó.
- No sabías que Kyuhyun es el director de todo? Tiene la oficina central en Nueva York. – Comentó Kibum, empezando a sacar la carne de la parrilla y sirviéndola en platos. Henry se abalanzó sobre ella.
- No tenía ni idea… - Susurré, sintiendo una incómoda presión en el pecho.
-Es eso un problema? No creo que te lo vayas a encontrar nunca si te dan el puesto, aun así… Sabes cuántas oficias y socios tienen por todo el mundo? Demasiados.  No deberías preocuparte por eso…
- A lo mejor estamos siendo muy poco delicados… - Comentó Kibum, mirándome con preocupación. – Estamos hablando dando por hecho que tú ya no sientes absolutamente nada por él…
- Y estáis en lo cierto. – Corté, intento recuperar la compostura. – Kyuhyun y yo dejamos de estar en contacto hace años, muchos.
- Ocho para ser exactos. – Dijo Henry, metiéndose un trozo de carne en la boca. Siwon le miró con satisfacción, feliz de su último hallazgo.
- Sí, ocho. – Suspiré y también comí un trozo. – Soy un adulto ahora, ya no soy aquel Sungmin que lloraba a la mínima. No siento nada por él, de hecho, apenas le recuerdo.
Apenas le recordaba, eso había dicho, pero esta presión en el pecho no hacía más que aumentar.
- Hoy de hecho, en el hotel donde te vi, se estaba llevando a cabo una reunión de la junta directiva de Besthow, pero no creo que estuviese él… - Comentó Siwon, hablando con cuidado. – Dicen que están muy liado en Nueva York con las acciones y esas cosas.
- Cómo se nota que el que se preocupa de “las acciones y esas cosas” soy yo… - Masculló Kibum, mirándole con desaprobación.
- Hiciste económicas para algo, amor. – Le dio un beso en la frente y su expresión se transformó a una de auténtica ternura. Parecían felices, y me hacía feliz que lo fuesen… Siwon no lo había pasado nada bien cuando cortó con Donghae.
- Yo… Hoy en la entrevista… - Me miraron. – Parecía como si me conociesen de algo o alguien les hubiese hablado de mí. No sé cómo decirlo…
- Dice que alguien le espiaba desde una ventana. – Farfulló Henry, con la boca llena de ternera y lechuga. – Es un paranoico. Ni caso.
- No es cierto, no lo soy. – Me defendí, intentando explicarme sin parecer que estaba loco. – Es solo que… El que me entrevistó, Changmin, dijo por teléfono algo de que por qué tenía que ser específicamente yo… Y la chica que estaba por allí, Yoona o algo así, también me miraba de forma rara, como si me estuviese escaneando.
- Los conozco. – Comentó Kibum. – Son algo raritos, así que es probable que te confundiese su comportamiento… O si no siempre puede ser que te haya recomendado algún profesor.
- Ves? – Inquirió Henry, señalándome con los palillos. – Exagerado.
- Te lo digo como director de una empresa, a veces preguntamos directamente a las universidades sobre una persona antes de decidir si ofrecerle venir a la entrevista o no. Para asegurarnos de que no es un perturbado o algo así aunque su currículum sea bueno.
Asentí con suavidad, aunque no acababa de cuadrarme que solo por la recomendación de un profesor todo el mundo se hubiese comportado así conmigo. Entonces, recordé el paso de peatones y el tumulto de gente entre los cuales juraría haber visto a un hombre muy parecido a Kyuhyun, que ya sabía que no era él porque estaba en Nueva York, y el hombre siniestro de la sonrisa fría.
- Hay algo más…
- Eso me suena. – Susurró Henry, recibiendo un codazo de mi parte. – Au.
- Cuando salí de la entrevista, entró un grupo de hombres el hotel… Y entre ellos, había uno que me miró fijamente todo el rato… Tenía una sonrisa muy… Fina.
- Fina?
- Fría. Calculada.
- Todos la tenemos para los negocios. Seguramente te confundiría con algún socio o algo… En ese hotel se hacen la mayoría de las reuniones de empresa de la ciudad. Sobre todo si además vienen socios del extranjero, como Japón o China.
Asentí de nuevo. Empezaba a sentirme realmente como un psicótico.
- Serían imaginaciones mías entonces… - Murmuré. Kibum me sonrió con comprensión.
- Sungmin, estabas bajo mucha presión. Además de que era tu primera entrevista. – Le miré. – Sabes? Yo en mi primera entrevista, estaba obsesionado con que tenía una araña en el traje. Me estuve moviendo y rascando durante toda la entrevista, de una forma que yo pensaba que era discreta y natural, pero que resultó no serlo. Cómo lo supe? Por la cara que puso mi jefe en aquel momento. Parecía que estaba viendo a un loco. – Rió, avergonzado. – Así que no te comas más la cabeza… Está bien.
Le sonreí con sinceridad y le di las gracias. Continuamos cenando y yo me sentía más tranquilo a pesar de que acababa de enterarme de quién era el cargo más alto de mi empresa. Cuánta gente en las multinacionales se encuentra con su jefe? Llega al dos por ciento? Lo dudaba. Es como si trabajases en McDonald’s y de repente vieses a Ronald McDonald por la calle un día (o quien fuese que dirigiese la cadena de restaurantes hoy en día). No había ningún motivo por el cual tuviese que encontrarme a Kyuhyun nunca más en mi vida.

- Min, te llaman. – Henry sacó mi móvil del bolsillo de la americana que descansaba en una silla a su lado y me lo tendió. Lo miré y me extrañó.
- Quién es? – Preguntó Siwon, sirviéndonos ya la segunda botella de soju de la noche.
- No lo sé… Es un número extranjero? Empieza por cinco…
- Tres cincos? – Asentí.
- Eso es Estados Unidos, no? – Comentó Kibum, mirándolo con interés.
- Omo! No será de Besthow? – Dijo Henry, poniendo voz de pito a causa del alcohol.
- No creo… - Murmuré, levantándome para ir a hablar fuera. – Y tú! Deja de beber! – Le quité el vaso que se iba a beber y le dejé en la mesa, lloriqueando como un niño por su biberón.
- Diga? – Una vez fuera del barullo del restaurante, pude escuchar una voz familiar al otro lado de la línea.
- Lee Sungmin? – Preguntó. Tragué saliva, nervioso ante esa pronunciación clara y cuidada.
- Sí.
- Le llamo de Besthow Corporation. Mi nombre es Choi Kang Changmin, no sé si me recuerda. Le entrevisté hoy para el puesto vacante en nuestra empresa. – Asentí hasta que me di cuenta de que no podía verme.
- Oh, sí. Cómo está?
- Verá, - Ignoró mi pregunta y eso solo aumentó más mi incomodidad. – le llamo para decirle que tras un largo estudio de los currículums a los interesados en el puesto, la junta directiva y yo personalmente pensamos que es usted el indicado para llevar a cabo el trabajo. – El corazón me iba a mil por hora. Sentía la boca completamente seca, y con la garganta ardiendo a causa del alcohol. – Así que enhorabuena. Es usted el nuevo asesor de marketing de Besthow Corporation.
- …
- Hola? Lee Sungmin?
- Oh! Sí, perdón. Es que no me lo esperaba… - Escuché lo que interpreté como una risa incrédula que, de nuevo, solo me hizo sentir aún más incómodo.
- Ya, bueno. Cuánto le gustaría incorporarse?
- Pues… Verá, yo es que vivo fuera de la ciudad, entonces tendría que mudarme, buscar piso y demás.
- Comprendo. Tiene dos días.
- Perdón?
- El puesto tiene que estar cubierto en un plazo de dos días, así lo quiso expresamente la junta directiva. Lo siento por las prisas, pero puedo prometerle que ha sido una decisión de última hora. Si quiere rechazar el puesto, está usted a tiempo.
- No, no. – Qué demonios estaba pasando ahí? De verdad quería hacerme creer todo mi entorno que esto era normal? – No habrá ningún problema.
- Le mandaré un email con los detalles. Un placer.
- Igualmente… - Changmin ya no escuchó mi última palabra, ya que el pitido intermitente me informó de que la llamada ya había sido finalizada.
Suspiré profundamente y miré al cielo oscuro de Seúl. No había estrellas, aunque eso nunca me había importado… Las luces de neón y las farolas serían mis estrellas a partir de ahora.

- Quién era? – Henry y los demás me interrogaron con la mirada cuando volví junto a ellos.
- El puesto es mío. – Empezaron a gritar y a chillar, emocionados por la buena noticia, pero yo no lograba sentirme del todo feliz. Algo me olía tanto a quemado que me invitaba a coger un extintor.
- Qué ocurre? – Preguntó Kibum mientras Siwon iba a pedir aún más soju y Henry dormitaba sobre la silla de plástico roja que rezaba Coca-Cola.
- No sé… Es que… Es todo tan rápido… Tan fácil… - Rió.
-Los que sois buenos estudiando es lo que tenéis. Que se os quiere en buenos puestos y antes de que otros os hagan otra oferta. Créeme, estaréis bien! – Miró a Henry y le dio una palmadita en el rostro. – Hey! Amigo! Que tienes que empezar a trabajar en una semana! Que os venís a Seúl!
Henry levantó los brazos y chilló un “viva” antes de caer completamente frito sobre la mesa. Sonreí con cansancio y suspiré.
- Cuándo empiezas? – Preguntó Siwon, peleándose con el tapón de la botella verde.
- En dos días… - Susurré, aún algo molesto por eso. Iba muy pillado de tiempo.
- En serio!? Y esa prisa!? Normalmente damos una semana de margen… - Siwon y Kibum se miraron, asintiendo, extrañados.
- Es que esto es tan raro…
- Tendrán prisa. Estarán planeando algo… Alguna fusión o algo. Y querrán tener la plantilla cubierta por si acaso. – Comentó Siwon.
- Sí, debe de ser, porque si no sí que es raro. – Rió Kibum, sirviéndonos el que sería el último vaso de la noche.

- Siwon… - Íbamos en su inmenso Mercedes, con Henry durmiendo en el asiento del copiloto.  Me miró, acomodando la cabeza de Kibum, que también dormía, en su hombro. – Sigues en contacto con Kyuhyun?
Me miró, serio, y asintió. – Sí, pero por negocios más que por nada. Por? Quieres que le diga algo?
Negué, apurado. – Al contrario. Si hablas con él… No quiero que le menciones nada sobre mí. Ni que voy a trabajar para él, ni que nos hemos visto, ni nada. – Me miró, ahora extrañado.
- Por? – Tragué saliva y retiré la mirada, mirando la ciudad pasar a gran velocidad ante mis ojos.
- No fue fácil olvidarme de él, así que no quiero que haya ni una mínima posibilidad de poder volver a cruzármelo en mi vida. – Podía sentir su mirada triste clavada en mi nuca.
- Está bien. – Dijo, suavemente. – No diré nada. Lo prometo.
Volví a mirarle y le sonreí. La presión en mi pecho me mataba ante la simple idea de poder volver a cruzármelo en mi camino.
“Quizás no lo tenga tan superado como presumo…”

Esa noche, volví a soñar con un aeropuerto vacío, en el que solo estábamos él y yo. Él sin rostro, y yo con el mío empapado en lágrimas, rogándole que no soltase mi mano nunca. Nunca.


-Fin-


19 comentarios:

  1. Holaaaa.... te comento que lei la primera parte y me encantó... lo ame y espere ansiosamente esta segunda parte!!!!!... me encantó y me da mucha pena min.. es siempre él el q sufre.. kyu tont hace lo que se le viene en gana.. espero min por mas q aun no halla olvidado al conejo no se deje vencer tan facil!!!! Actualiza pronto!!!!!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias!! Espero que también te guste esta segunda parte, actualizaremos lo antes posible.
      Gracias por leer y comentar! <3

      Eliminar
  2. waa! me encanto, el teaser me hizo llorar y esperar un gran fics, atualiza pronto!! que lo seguire leyendo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ahora mismo está en pausa indefinida, pero espero poder continuarlo pronto. Muchas gracias por leer y comentar, y me alegro de que te guste!

      Eliminar
    2. SII, esperare para que puedas continuar!! ^^

      Eliminar
    3. Muchas gracias por tu comprensión. Saludos!

      Eliminar
  3. ¿Por qué cancelado? Ya no lo continuarás?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, ha sido cancelado. No me motivaba cómo iba la historia, y además, Sungmin anunció su matrimonio y es algo incómodo escribir yaoi con un hombre casado aunque claramente gay xD
      Perdón por las molestias, espero que lo entiendas y te animo a pasarte por algún otro de mis proyectos
      Gracias por leer y comentar!

      Eliminar
  4. Unnie no lo canceles piensa positivo y continualo plis porfas unnie continualo esta muy buena y nos dejas con la espina ...... :c

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo siento muchísimo, de verdad. Espero que te gusten el resto de mis proyectos al igual que te ha gustado este <3

      Eliminar
    2. La verdad unnie leería lo demás pero solo le del Kyumin.... pero bueno gracias por invitarme a leer ti otros fic's pero no creo que sea posible que lo lea... ^^ pero bueno isiste lo que pudiste :&

      Eliminar
    3. Bueno, como quieras :3 Siempre estaremos aquí para ti con los brazos abiertos <3

      Eliminar
  5. Por faaaaaaaaaa continualoTT___________TT
    Esperé dos años por la continuación, no me rompas el corazón, yo sigo escribiendo KyuMin también sé que vos podes, por faaaa continualo </3

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo siento mucho, no va a ser posible...
      Te invito a que te des un paseo por el resto de mis proyectos, a ver si te gustan.
      Muchas gracias por leer y comentar!

      Eliminar
  6. Que lastima, a muchas se les fue el animo con la boda de Sungmin y han dejado de escribir dejando muy buenos ff a medias dejandonos frustradas pero no podemos hacer nada mas que respetar su decision.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sentimos la decepción. Espero que te gusten el resto de mis proyectos! ^^

      Eliminar
  7. Continualo porfavor TT__TT fue mi primer fanfic que lei.. Fue con el que me enamoré de kyuhyun.. Al menos dañe un final.. Pero no lo dejes así.. No lo canceles </3 no PORFAVOR

    ResponderEliminar
  8. Una lástima que no lo haya leído antes. En verdad lo amé demasiado,me reí y emocioné como loca. Comprendo que se te haya ido la motivación, en serio, pero por favor no seas cruel y al menos dinos un poquito del final que habías pensado, así sean unos renglones, te lo agradecería tanto. Ahora ya no quiero mirar otros fics, necesito, aunque sea un poco de este. ¡POR FAVOR! U.U

    ResponderEliminar
  9. Como que pause :'v no me dejes así, no por favor TwT leí la primera parte la ame, joder si es verdad porque Min siempre sufre :'v pinshe vida, aaa Dios está super genial, por favor dime que si lo continuarás, porque dice cancelado? D': nos dejaras con la intriga DX Nooooooooo por favor, TnT ha pasado tanto tiempo, mis esperanzas han muerto ��������

    ResponderEliminar