21 de noviembre de 2014

[TEENFINITE] Forbidden. Capítulo 18: Mine.

Changjo POV

- Quién era? - Changhyun se desperezó en su cama, bostezando bajo mi mirada frustrada. Es que no pensaba sacar el tema? Desde el día de la sala de prácticas no habíamos vuelto a hablar de lo nuestro, y yo estaba hasta las narices. Ni siquiera sabía si habíamos vuelto!
- Dongwoo Hyung preguntando por Byunghyun Hyung. - Me miró, extrañado, mientras yo me metía en mi cama con el ceño fruncido.
- Pero… Qué hora es? Vino a buscarlo ahora?
- Querrán salir a tomar algo… Yo qué sé? - Protesté, dándole la espalda en la cama, encarándome contra la pared. Maldito Changhyun… Iba a llevarme por el camino de la amargura!
- Es raro. - Musitó.
- Ya. - Por qué no me preguntaba ya qué me pasaba? Luego el orgulloso del grupo era yo? Aunque pensándolo bien, Changhyun llevaba esquivándome desde entonces… No me había dirigido ni una mirada, aunque esta noche por primera vez me había permitido entrar a dormir en mi cama. Bueno, permitir… Digamos que yo entré y no fui expulsado a patadas y chillidos.
- Bueno… Tendrá un motivo.
- Sí.
Mi personalidad arisca no ayudaba a la situación.

- Bueno… Buenas noches. - Musitó, y escuché el roce de las sábanas contra su pijama, lo que hizo que casi se me desencajase la mandíbula de sitio por la presión que ejercí sobre ésta. Malditas sábanas, maldito pijama, maldita cama y maldito Changhyun! Solamente la imagen de su pijama me ponía enfermo. Pero enfermo… Enfermo. Enfermo hormonal. No necesito más variantes de la definición.
- Sí. - Espeté de nuevo, sin moverme.
- Que descanses, Jonghyun.
- CÓMO VOY A DESCANSAR!? - Rugí, saltando de mi colchón a una velocidad que me apuesto el cuello a que tuvo que batir algún récord. Una lástima no haberla medido…
Changhyun se giró hacia mí, sobresaltado.
- Perdona, te he molestado? - Abrí los ojos como platos en una expresión de mi profunda frustración.
- Me estás vacilando? - Siseé, bajándome del colchón y postrándome a los pies de su cama, desde donde me observaba, completamente fuera de lugar. Y el idiota del grupo era Chanhee? Y una mierda.
- Ya me callo, perdona. Sé que te molesta que te desvelen. - Musitó, bajando la mirada hasta los dibujos de Bob Esponja de sus sábanas. Cerré los ojos, armándome de paciencia.
- Changhyun, - Mascullé. - hoy por primera vez desde que casi nos acostamos en la Woollim, conseguí conciliar el sueño. De esa frase, lo que menos me importa es mi sueño, sabes?
Changhyun elevó su mirada hacia mí, sorprendido. Eso también me sacaba de quicio. Todo me sacaba de quicio desde entonces. Mis hormonas no podían soportarlo más.
- No… No sé a qué viene eso ahora. - Musitó, parpadeando nerviosamente.
- Ahora!? AHORA!? AHORA Y SIEMPRE! - Chillé.
- Calla, vas a despertar a los demás! - Se apresuró a susurrarme, sonrojado, posiblemente avergonzado de que se rompiese su imagen del pequeño del grupo. Yo me había deshecho de ella a base de gimnasio porque no la soportaba… Por qué a él le gustaba tanto?
- Me importa un cuerno. - Susurré, mirándole con rabia. - Por qué no eres capaz de hablar conmigo de ese tema? Soy el único al que le importa?
Bajó la mirada y suspiró profundamente.
- Claro que no.
- Entonces? - Mi tono de frustración se iba transformando poco a poco en uno de súplica.
- Yo no soy como tú, Jonghyun. - Dijo, elevando la mirada hasta encararme. Sus ojos preocupados hicieron que mi enfado se disipase en una milésima de segundo, y entonces solo quise abrazarle. - Yo no tengo esa confianza en mí mismo, yo no podía siquiera mirarte a la cara después de… Eso.
Enarqué una ceja y suspiré, sentándome en su colchón, lo suficientemente alejado como para que no pusiese el grito en el cielo.
- Te crees que para mí no fue difícil? Que no estaba muriéndome de miedo? Lo único que superaba mi miedo era mi deseo, Changhyun.
Su rostro se volvió escarlata y todo su cuerpo se tensó. Yo volví a suspirar y bajé la mirada.
- No lo parecía, desde luego.
- Pues lo estaba, Changhyun. Te lo juro. Pero te quiero tanto que me daba igual, y no podía controlarme más.
- Deja de decir cosas embarazosas. - Dijo, suspirando a continuación. Sus palabras me echaron completamente para atrás.
- Embarazosas? - Repetí, claramente dolido.
- Jonghyun… - Me llamó, mirándome con comprensión. - Oye, yo… No sé. No sé siquiera qué hay entre nosotros, mucho menos sobre mantener relaciones.
- No sabes si me quieres o no? - Dije, intentando mantener la compostura, pero mi niño interior quería irse a la cama a llorar desconsoladamente.
- Lo sé… Pero no sé si estoy preparado para quererte.
Me levanté, frustrado de nuevo. Quería irme de ahí… Sería demasiado tarde para acoplarme a Byunghyun? Probablemente sí…
- Cuando empezamos a salir no era así. - Espeté, intentando deshacer el nudo que se formaba en mi garganta, cada vez más grueso.
- Ya, pero luego vi cómo eras realmente y me asustaste. - Musitó, tapándose cuidadosamente las rodillas con la manta.
- No me fastidies, Changhyun. - Dije, sin poder evitar que mis ojos se humedeciesen. - Nos conocemos demasiado bien, hemos ido a la escuela juntos, vivimos juntos desde hace mil años, y me dices que no sabes cómo soy? Tú me conoces mejor que yo! Tú sacas lo poco bueno que hay en mí… Tú… - No pude continuar, porque un sollozo salió de mi boca y me tuve que girar para que no me viese llorar. Maldita sea… No lloraba desde mi nacimiento! Por qué!? Odiaba a Changhyun. También él sacaba mis sentimientos más profundos a florecer.
- Te quiero. - Susurró a mi espalda, pero eso solo hizo de mi llanto algo peor. - Pero… Tengo miedo.
- No quiero darte miedo, Changhyun. - Sollocé, sin mirarle a la cara. - Quiero que todo sea antes de la estúpida pelea que tuvimos… Quiero que todo sea como si Byunghyun y Chanhee no existiesen! Que podamos querernos tú y yo sin nadie más que nos afecte.
- No solo me das miedo tú, Jonghyun. - Dijo, y escuché los muelles del colchón resentirse y unos pasitos tímidos a mi espalda. - Me doy miedo yo, porque no me controlo cuando estoy contigo. Hago muchas tonterías, no soy yo, y me da miedo que volvamos a pelearnos y que la próxima vez ya no haya marcha atrás.
Me giré, encontrándomelo más cerca de lo esperado, mirándome con los ojos humedecidos.
- Entonces, como tienes miedo de fracasar, no quieres intentarlo? - Asintió lentamente con expresión triste.
- Yo no soy como tú… No soy tan lanzado. No logro decidir algo por mí mismo tan fácilmente, y menos si te incumbe a ti.
- Pero… Yo te quiero, Changhyun. - Musité, acercándome a él un paso, el mismo que él retrocedió con la mirada baja. Fue como una puñalada.
- Y yo a ti… Pero no creo que sea buena idea volver a estar juntos.
- Me estás diciendo que deberíamos dejarlo para siempre? Definitivo? - Asintió lentamente de nuevo. - Pues no lo acepto.
Levantó la mirada, sorprendido. Mi furia interna empezaba a adueñarse de mi raciocinio.
- Qué?
- Que no lo acepto. Me niego. No, no quiero.
- Jonghyun…
- Que no! - Chillé, entre lágrimas. La simple idea de sentirme rechazado por Changhyun hacía que me sintiese impulsado a hacer las maletas y salir de esa casa. - Y además es que no entiendo el motivo! Que nos peleamos? Todas las parejas lo hacen! Por qué tienes que ser así? Pretendes que estemos siempre de acuerdo en todo el resto de nuestras vidas? Eso es imposible, Changhyun. Cómo sería posible? Nos queremos, no necesitamos nada más.
Changhyun me miró, sorprendido por mis palabras.
- Pero… Yo me siento inseguro…
- Pues confía en mí. - Susurré, avanzando de nuevo un paso, uno que esta vez él no retrocedió. Tomé sus manos entre las mías y las coloqué a la altura de mi pecho. - Déjame que te demuestre que eres más fuerte de lo que crees. De lo contrario, no habrías sido capaz de cargar conmigo hasta aquí. Sé que no soy fácil, y que no soy la persona más razonable del mundo, pero te puedo asegurar que te quiero y que es lo único que me impulsa a estar haciendo esto ahora mismo.
Changhyun no mostraba expresión alguna en su rostro, y eso solamente me ponía más nervioso. Demonios… Se creía que para mí esto era fácil? Pero si él se tenía en tan poca estima, alguien tendría que luchar por lo nuestro.
- Bésame. - Espetó de repente. Yo parpadeé, creyéndome que las altas horas de la madrugada en las que me situaba estaban provocándome delirios.
- Eh?
- Diablos, Jonghyun. - Dijo, visiblemente frustrado y mirándome con ansias a los ojos. - Bésame ahora mismo u olvídate de mí para siempre.
No entendía nada. Absolutamente nada. Pero quién era yo para negarme a sus deseos? Y más aún si de paso complacían los míos, así que posé mis manos con delicadeza en ambas mejillas suyas y me aproximé a su rostro, ni muy rápido ni muy despacio, hasta que posé mis labios sobre los suyos y fue como un analgésico general a todos mis males. Mi enfado, mi frustración, mi furia, mi rabia, mi miedo, mi inseguridad… Todo había desaparecido con un simple beso. Ahí fue cuando entendí que yo no necesitaba nada más que a Changhyun a mi lado. Para siempre, a todas horas, sin separarnos el uno del otro ni para respirar. Nada podría pasarme ni hacerme daño mientras estuviésemos juntos, y este beso solamente era una prueba de que esa filosofía no era únicamente mía.
- Por qué siempre tengo que confesarme yo? - Susurré, separando levemente de sus labios, lamiendo con lentitud su labio inferior, ese que me llevaba a la locura. Él suspiró profundamente, con los ojos cerrados, y negó lentamente con la cabeza.
- Es más romántico así. - Musitó, sin abrirlos, acercándose con los labios entreabiertos, rojos y ligeramente hinchados a los míos, buscando otro beso que correspondí sin pensármelo más. Devoré su boca como si se me fuese la vida en ello, invadiéndonos mutuamente, saboreándonos, respirando con tanta fuerza que la excitación del ambiente podía cortarse con un cuchillo. Aun así, pese a que las ganas me podían, decidí controlarme. Changhyun era tentador, y lo deseaba, pero quería que confiase en mí y que, por una vez, no pensase que solo le quería por el sexo. Si tenía que aguantarme, por nuestro futuro juntos, lo haría. Joder, quería casarme con él algún día! No iba a fastidiarlo por un calentón.
- Jonghyun… - Gimió en mis labios, agarrándome la camiseta con ansias. Tantas, que me la estaba levantando, no sé si intencionadamente o no, pero aquello empezaba a sobrepasarme. “Calma, Jonghyun. Cuenta hasta 10!”- Jonghyun… - Gimió de nuevo. “9… 8…”
- Mh? - Respondí, respirando entrecortadamente. Buscaba aire, pero Changhyun no me permitía ese lujo si no era el suyo propio. “7… 6…”
- Lo siento. - Susurró, besando mi barbilla. De verdad tenía que decirlo con esa voz tan sexy!? “5… 4… 3…”
- No pasa nada. - Musité, dejándome besar y besando también. Las manos de Changhyun directamente sobre mi piel… “2…”
- Te deseo. - Abrí mis ojos como platos. “Ni 1 ni hostias. A tomar por culo.”
Le empujé sobre el colchón y a una velocidad pasmosa me quité la camiseta bajo la mirada brillante y lujuriosa de Changhyun. Y quería mantener su imagen de niño? Imposible. Cuando quise darme cuenta, ya me había abalanzado sobre él y le arrancaba la ropa, daba igual si parte de su piel se iba con ella o no. Mi testosterona era un arma delicada con la que no se podía jugar así como si nada. Aun así, Changhyun no parecía en absoluto molesto ante la idea de perder su virginidad en este arrebato pasional.
- Espera un momento… - Dije, apartándome de él en un momento de lucidez. Ya tenía ambas piernas a cada lado de su cadera, y él me miraba desde debajo, visiblemente molesto por la interrupción. Sudaba y tenía la camiseta subida hasta las axilas por mi culpa. Joder… Era tan sexy… No era musculoso, ni especialmente esbelto, pero a mí me volvía loco. Esa piel blanca, suave, sin marcas, virgen... Demasiado. Pero sacudí de nuevo mis pensamientos, a pesar de que mi entrepierna protestaba a gritos por continuar la acción. - Esto significa que lo hemos arreglado, no?
Changhyun enarcó una ceja, enfadado.
- Ahora, Jonghyun!?
- Sí. Necesito saberlo antes de seguir. - Resopló, frustrado.
- Sí, lo hemos arreglado.
- Me quieres? - Me miró con el instinto asesino de un cachorro de tigre brillando en sus ojos. Sonreí con maldad. Sí, esto ya era por fastidiar. “Venganza…”
- Sí, te quiero.
- Mucho?
- Mucho.
- Para siempre?
- Que te den. Quita de encima!
- No! Perdona! Era broma!
- Que te quites!
Le callé con un beso apasionado y me deshice de sus pantalones. Mi primera vez con Changhyun fue el mejor día de mi vida. Le amaría para siempre, sería más comprensivo, aprendería a controlar mi genio y me esforzaría más en aprender a entenderle. Para siempre.

Myungsoo POV

La verdad es que ni sabía cómo, después de una noche de alcohol y coqueteo, Sungyeol había acabado convenciéndome para venir aquí. Jessica no cerraba la boca, y Sungyeol estaba tan borracho que había adoptado el dialecto de stripper y estaba como pez en el agua.
- Yo quería irme a casa a hacer el amor… - Protesté, liquidando el milésimo chupito de tequila de la noche. Mi cara de asco no tardó en aparecer, y Jessica se apresuró a pasarme una rodajita de limón empapada en sal.
- Te aguantas. Por una noche no te vas a morir. - Replicó Sungyeol, con una sonrisa cómplice a mi “amiga”.
- Y si me sale un tumor ahí abajo? Te harás tú responsable?
- Completamente. - Resoplé, frustrado. La música de discoteca y las luces rosas me horrorizaban, y además estaba demasiado borracho como para indignarme completamente.
- Quiero salir a fumar. - Protesté. Sungyeol y Jessica me miraron extrañados.
- Myungsoo, sé que estás pedo, pero he de recordarte que no fumas.
- Empezaré si eso implica que puedo salir de aquí. El humo artificial me marea, y si bebo otro chupito acabaré en urgencias. - Mascullé, tirando de la manga de su jersey como un niño que quiere entrar en un parque de atracciones. La diferencia era que yo quería largarme de una vez.
- Ver una versión así de él es completamente nuevo para mí. - Dijo Jessica, divertida. Estupendo, me había convertido en la atracción del club.
Sungyeol rió.
- No le has visto rogar por un polvo… Un día lo grabo y te lo mando por Kakao. - Jessica aplaudió, entusiasmada, mientras Sungyeol se reía en su película mental.
- Yah… - Mascullé. - Te estás ganando a pulso que te deje aquí solo.
- Sí, hombre, sí. Calla un poquito. - Dijo, sirviéndome otro chupito. Este novio mío quería matarme de una sobredosis de limón, porque el tequila me afectaba menos que ese diabólico cítrico.
- Tsk. - Mascullé, liquidando el líquido amarillento, y rechazando el limón con expresión de enfado. - Bueno, estás bien aquí? Han vuelto a acosarte o algo?
Jessica me miró con una sonrisa agradecida y negó con la cabeza. La verdad es que se la veía feliz.
- Estoy genial, gracias, L. - Sungyeol rió al escucharle llamarme así. - La verdad es que me he apuntado a un curso de maquillaje y acudo antes de que toque abrir aquí. No hace falta estudiar demasiado, así que lo puedo compaginar bien con mi trabajo.
- Eso es maravilloso. - Le dijo Sungyeol, tomándole la mano con gesto amoroso. Fruncí el ceño. No era necesario tocarla, o sí!? Demonios… Ella se llevaría más skinship esa noche que yo.
- Gracias!
- Podrías acabar siendo nuestra maquilladora! La que nos han puesto ahora no me gusta nada… No sabe hacer que mis ojos parezcan grandes, y me parezco a Sunggyu. - No pude evitar sonreír.
- Tus ojos ya son grandes de por sí, no necesitarías tanto eyeliner… - Murmuró Jessica, sirviéndole un Martini a un señor calvo que la desnudaba con sus ojos ebrios. Lo peor? Llevaba un anillo en el anular. Despreciable… - Yo creo que con resaltar algo la forma natural debería ser más que suficiente.
Sungyeol le sonrió con dulzura. Era como un niño con un cachorro… A la mínima de cambio querría llevársela a casa.
- Contratada! - Chilló, levantándose del taburete con una agilidad sorprendente teniendo en cuenta su nivel de alcohol en sangre. - Ronda de chupitos para todos!
- De eso nada. - Le regañé, obligándole a sentarse de nuevo.
- Chicos, qué tal todo por aquí? - Sandy, la dueña del local y buena amiga mía y de Sungjong, apareció de la nada con un biquini de cuero. La saludé con una sonrisa.
- Estupendo, y tú qué tal? - Respondí, mientras observaba a Sungyeol empezar a dormitar sobre la barra. Ella le miró con ternura y suspiró.
- Genial. Oye, este es tu novio, no? - Asentí, mirándole con reproche. Se había quedado frito en un bar de striptease? Qué clase de hombre era? Hasta yo había mirado a Sandy y a Jessica en algún momento! “Aish…”
- Sí…
- Es precioso! Sungjong es más mono, pero este te pega mejor.
- Para mí él es el más mono del mundo. - Respondí de forma automática. El tequila sacaba mi sinceridad bochornosa.
- Qué bonito! - Dijo, dando pequeños saltitos sobre las plataformas exageradas. - Oye, en serio, me alegro un montón de que hayas por fin entrado en razón, cielo.
- Y yo… Ya tardaba, no?
- Mucho. - Reímos.
- Quieres una copa? Invita la casa. - Levanté la mano a modo de rechazo modesto.
- Estoy más que servido, pero gracias.
- Como quieras.
- Y hablando de Jonggie… Está aquí, no? - Ella asintió suavemente con expresión triste.
- Está durmiendo en su cuarto.
- Ya es “su cuarto”?
- Vive ahí, así que… Sí. - Sonrió y se encogió de hombros. Parecía preocupada, y con motivo.
- Está durmiendo?
- Qué va… Bajará en breves me imagino. - Parpadeé, sin entender.
- Paga el alquiler fregando o de camarero?
- Bailando. - Respondió, mirando en ese momento a la puerta que se abría y dejaba pasar a Sungjong, con semblante serio, mallas ajustadas y una camiseta holgada. Abrí los ojos como platos y la miré. Ella se encogió de nuevo de hombros.- Te sorprendería la de clientela que atrae… Piensan que es una chica extra-plana. Los hombres estáis enfermos…
- Gracias. - Murmuré, girándome para mirarle, sin poder evitar preocuparme. Este chico estaba perdidísimo, y no podía evitar sentir que en parte era culpa mía. Bueno, en parte y en un porcentaje relativamente alto… Pero también era culpa de ese enano oxigenado que no tenía lo necesario para enfrentarse a la realidad y amar a mi pequeño!
- Subo ya. - Dijo Sungjong, asomándose fugazmente por la barra, sin fijarse en que Sungyeol y yo estábamos ahí. Bueno, yo al menos, ya que el otro estaba ya soñando con arcoíris en un mar de vodka.
- Todo tuyo, cielo. - Respondió Sandy, secando unos vasos de tubo con un trapo.
- De eso nada! - Entonces, cuando quise darme cuenta, Howon había salido de la nada y agarraba a Sungjong por la muñeca, que también le miraba con cara de estar viendo un fantasma. Y ese de su lado era Chunji? Qué diablos estaba pasado ahí?
- Hyung!
- Sí, exacto. No te vas a subir a esa barra! - Sungjong parpadeaba, nervioso, mientras miraba a su alrededor, temeroso de llamar la atención demasiado. Lo bueno de que fuesen las 4 de la madrugada era que absolutamente todos estaban borrachos como cubas y no se enteraban de nada.
- Qué haces aquí con… - Se calló cuando reconoció a Chunji, que lo miraba todo con expresión de susto. Me imagino que esta clase de sitio no era de su agrado, a pesar de todo el rosa que había. - Oh.
- Tenemos que hablar contigo. - Dijo, llevándoselo al fondo de la barra. Sandy y yo nos miramos, cada uno más confuso que el otro. Por el momento, opté por quedarme en la penumbra a observar.
- Quiénes son? - Preguntó, mirando con curiosidad al trío del fondo.
- Uno es Howon, Hoya para las fans, y está en nuestro grupo. Es muy amigo de Sungjong y es el novio de Dongwoo.
- Quién?
- El hiperactivo que se ríe raro.
- Ah, ya sé. - Asintió, sin quitarles el ojo de encima. - Y el otro?
- Ese es el novio del chico del que está enamorado Sungjong. - Me miró con expresión de pánico.
- Dios mío… No le pegarán, verdad?
- Sungjong sabe defenderse.
- A él no! Digo al pequeñín! Pobre… Parece que se va a romper de un momento a otro… Mira qué cara trae!
Entonces me fijé en la expresión de Chunji. Sí, la verdad es que parecía estar algo falto de vitaminas, defensas y… de todo en general. Ese tipo comía?
Zarandeé por el hombro a Sungyeol, que roncaba a mi izquierda.
- Qué quieres? - Protestó, incorporándose perezosamente.
- Howon y Chunji de Teen Top están hablando con Sungjong. - Me miró, con cara de cuerno quemado.
- Estás borracho, Myungsoo, vámonos a casa. - Resoplé.
- Que va en serio! Mira! - Señalé al fondo del pub y él parpadeó, fijando la vista, y finalmente me miró, sorprendido.
- Qué hacen esos dos aquí? Y juntos?
- No lo sé… Pero no me da buena espina. - Abrí los ojos como platos al observar cómo la mano de Sungjong se alzaba en el aire y se estrellaba contra el rostro de Chunji. Sungyeol también lo vio, y fue un reflejo involuntario el salir corriendo hacia ellos. Cuando nos dimos cuenta, Sungyeol sujetaba a Sungjong, que se retorcía con lágrimas en los ojos, y yo a Chanhee, que mantenía los ojos cerrados en una expresión de tristeza. Howon estaba descolocado completamente.
- Qué hacéis vosotros aquí, pervertidos? - Chilló, mirándonos con sorpresa.
- Venir a visitar a la prostituta de Myungsoo. - Respondió Sungyeol, solamente empeorando más nuestra imagen con la aclaración. Resoplé. - Y vosotros? Sobre todo tú.
Su mirada se clavó en Chunji, que abrió poco a poco los ojos. La verdad es que su imagen era deplorable. Sungjong se retorcía entre los brazos de Sungyeol, pero fue perdiendo fuerza hasta caer sobre sus rodillas y abrazar las piernas de mi novio, sollozando. Todos nosotros le miramos con reproche, pero Chunji solo suspiró. Por un momento temí que se desinflase.
- Jonggie… - Sungyeol se agachó, acariciándole la cabeza a nuestro pequeño, que lloraba desconsolado.
- Habla. - Siseé a mi prisionero, que ni oponía resistencia.
- Yo lo haré. - Dijo, Howon de repente. - Chanhee ha cortado con L.Joe, porque L.Joe está enamorado de Sungjong, pero Chanhee cree que L.Joe tiene miedo a que le rechace después de… Todo. Así que se niega a romper, y al final Chanhee vino a hablar con Sungjong, pero en cuanto le dijo que venía a hablar de Byunghyun, Sungjong le pegó. Fin.
Sungyeol y yo nos miramos, desconcertados.
- Espera, por partes. - Dijo Sungyeol, acariciando la espalda del maknae, que yacía en el suelo, temblando por el llanto. - Dónde están Woohyun y Sunggyu?
- En casa haciendo cosas de mayores.
- Qué dices!?
- Te lo juro.
- Creo que no es el momento de marujear, señoras. - Interrumpí, soltando a Chunji y suspirando. - Tú, por qué has dejado al raperito?
Chanhee me miró con una tristeza que hizo que todo el alcohol de mi cuerpo se evaporase. O era el mejor actor del mundo o yo debía dejar de sospechar de él.
- Porque no me ama. He intentado todo para que lo hiciese, o lo volviese a hacer, pero no hay forma. Solamente se está haciendo más y más daño a sí mismo, y no quiero que acabe tocando fondo.
Su voz sonaba temblorosa y rota. Daba mucha pena, pero yo no era capaz de confiar plenamente en él.
- Vas en serio? Porque como no sea así, tendrás que gastarte tu fortuna en una reconstrucción de rostro. - Mascullé. Él ni se inmutó, simplemente asintió lentamente, con la mirada ahora fija en Sungjong.
- Te ruego que me escuches. - Dijo, arrodillándose a sus espaldas. Sungyeol obligó a Sungjong a girarse y encarar a su mártir, pero la expresión del rostro de Sungjong no era mucho mejor. - Por favor… Habla con Byunghyun… Hazle tú lo feliz que yo no logré hacerle…
- Deja de torturarme. - Sollozó Jong, con ojos rabiosos. - Déjame en paz!
- Por favor…
- FUERA! TODOS! FUERA!
- Suficiente. - Interrumpí los gritos desgarradores de Sungjong, colocándome de pie entre ellos dos. Chanhee me miró, desolado, y podía sentir la mirada furiosa de Sungjong taladrándome la nuca, pero me daba igual. - Oye, chico de Teen Top, no voy a permitir que esto siga así. Por muy hijo de puta que yo haya sido en el pasado, ahora tengo unos principios, y sé que no dejaré que este niño sufra más de lo que ha sufrido. Supéralo, L.Joe es el cabrón que yo era hace unos meses, y no pienso dejar que le toque ni un pelo.
- Myungsoo… - Sungyeol me reprendió a mi espalda, pero le ignoré. Howon cerraba los ojos a mi lado en una expresión de desacuerdo, pero también le ignoré.
- No lo entiendes… Él no es así, solamente está asustado…
- Silencio. - Espeté, mirándole desafiante. Él rompió en lágrimas silenciosas; me imaginé que su lucha tampoco debía de estar siendo nada fácil.- No permitiré que vuelvan a estar juntos.
- Pero es que eso no es asunto tuyo! - Rugió Sungjong a mi espalda, asestándome una patada en la espalda que, he de admitir, dolió bastante. Me giré, mirándole con confusión, y él lloraba de rabia. - Para empezar, todo esto es culpa tuya! Por qué tuviste que amenazarle!? Cómo te sentirías si alguien te amenazase con robarte tu vida!? O peor aún, con destrozarla!? Que lo pasase por alto no significa que no sepa perfectamente lo que pasó, Myungsoo! Y tú eres un capullo, más o igual que él, que solamente es un cobarde que no ha sabido dar la cara por lo que quería! TE ODIO!
Aquello fue directo a mi pecho, y dolió mil veces más que cualquier patada o hueso roto.
- Me odias? - Susurré.
- TE ODIO! TE ODIO! TE ODIO! - Gritó, ahogándose sus gritos en el abrazo forzado de Sungyeol, que me miraba con tristeza.
- Y con motivos. - Susurré. - Tienes razón, esto es culpa mía… Pero quiero ayudarte, Sungjong. He cambiado.
- La gente no cambia. - Siseó. Sungyeol negó suavemente con la cabeza, y con la mirada me dio a entender que era suficiente por hoy. Yo asentí, y me fui a una esquina a pedir una copa, o la botella directamente. Mi pasado me perseguiría para siempre.

Chunji POV

Nada estaba saliendo como yo esperaba… Sungjong estaba muy poco receptivo, pero no le culpaba. Estaba completamente destrozado, y todo era culpa mía y de Myungsoo. Habíamos hecho un pacto con el diablo, y ahora era demasiado tarde para borrar nuestra firma.
Solamente si hubiese sabido retirarme a tiempo… Cuánto sufrimiento habría ahorrado? Mío, a Byunghyun, e incluso a Sungjong. Verle ahí, gritándole a un miembro de su grupo que le odiaba, era horrible. Me destrozaba por dentro.
- Jonggie… - Sungyeol intentó hablar con él de nuevo, acariciándole el pelo y susurrándole al oído. - Escúchame, sí? Por qué simplemente no intentas hablarlo? No digo que tengas que darle otra oportunidad, porque no se la merece, al igual que tampoco se la merecía Myungsoo, lo de darla ya es decisión propia. Pero yo opino que hablarlo no te haría mal… Quizás te sientas aliviado, no crees? El pecho tiene que pesarte toneladas con todo eso ahí guardado… Libéralo un poquito, solo un poquito…
Howon se unió al abrazo y le acarició la espalda, con el rostro sumido en la tristeza. Qué había hecho? Era un monstruo…
- Jonggie… - Le susurró. Sungjong parecía haberse calmado un poco. - Sungyeol tiene razón. Hablar no quiere decir que vaya a estar todo bien de inmediato, pero sí que hará que te sientas mejor. Podrás volver a respirar, y puede que incluso duermas un poquito.
Se miraron entre ellos e hicieron una mueca de poca convicción. La misión era arriesgada, pero en mi opinión, merecía la pena intentar llevarla a cabo. Poco más se podía perder.
- Lo intentarás? - Susurró Sungyeol, cuando Sungjong se apartó poco a poco de él, sollozando y temblando, aunque menos al borde del ataque de nervios anterior. Se giró lentamente y me miró, con ojos inertes. Tragué saliva. Iba a pegarme de nuevo?
- Dónde está Byunghyun? - Susurró. Le sonreí, agradecido.
- Muchísimas gracias, Sungjong. De verdad que…
- He preguntado que dónde está. - Me interrumpió, sin expresar ningún tipo de emoción. Asentí suavemente. No iba a presionar… Era obvio que se había creado una coraza anti-sentimientos para mentalizarse del encuentro, y era inteligente por su parte. De esa forma no podría recibir daño alguno. Ojalá yo me hubiese creado una en su momento.
- Entrando por la puerta. - Susurró Howon. Me giré, y vi entrar a Dongwoo, con cara de susto por el repentino ambiente a lupanar y a Byunghyun, que para mi sorpresa, parecía de lo más normal.
- Hola… - Saludó Dongwoo con timidez, al ver la numerosa reunión que se había formado de la nada. - Qué haces aquí?
- Venía a conocer a la puta de Myungsoo. - Repitió Sungyeol. Prefería no preguntar sobre el tema, y por la cara que puso Dongwoo, me imaginé que él también razonó que esa era la mejor opción. - Y tú?
- Cumplir mi parte del plan. - Dijo, apartándose un paso a la derecha, dejando aparecer a Byunghyun. Le miré con tristeza, y él me miró a mí. No encontré enfado o rencor en su mirada, y eso me dolía más aún, y es que sabía a lo que había venido. A dejarme atrás de una vez por todas. “Adiós, amor mío.”
- Bueno… - Dijo Sungyeol, caminando hasta colocarse detrás de Howon. - Quizás deberíamos irnos.
- No lo veo necesario. - Espetó Sungjong, clavando su vista en Byunghyun, ilegible de emociones. - No tardaremos mucho.
- Sungjong… - Susurró Byunghyun. Me fijé en su expresión. Su mirada era de pura pena y amor. A mí jamás me había mirado así, y podía apostar a que daría su vida por poder lanzarse a abrazarle en ese mismo momento.
- Qué diablos haces aquí? - Todas las miradas, menos la de Sungjong, se dirigieron a Myungsoo, que aparecía en ese momento en escena. Cerré los ojos al ver la tragedia que se avecinaba.
- Myungsoo. - Le reprochó Sungyeol, pero le ignoró completamente.
- Creí haberte dicho en su momento que te mantuvieses alejado de mi maknae, o no? Ves por lo que te lo decía? VES LO QUE HAS HECHO!? - Rugió. Byunghyun tensó la mandíbula y se abalanzó sobre él, cayendo ambos al cuello, con los ojos inyectados en sangre y echando espuma por la boca.
- ERES UN HIJO DE PUTA! - Bramó Byunghyun, cuando logramos separarlos entre los cuatro. Howon y Sungyeol sujetaban a Myungsoo, que forcejeaba sin cesar, ansiando arrancarle los ojos a mi compañero, y Dongwoo y yo agarrábamos a Byunghyun, que apostaba a que tenía sed de pura sangre.
- Y TÚ UN COBARDE!
- ME ENGAÑASTE! ME HICISTE CREER QUE SI NO LE DEJABA ME DESTROZARÍAS LA VIDA! A MÍ Y A TODOS MIS SERES QUERIDOS!
- Y TÚ FUÍSTE LO SUFICIENTEMENTE COBARDE COMO PARA NO ACEPTAR MI FAROL DE GUERRA, COBARDE! QUE ERES UN COBARDE!
- AL FINAL GANASTE, CAPULLO! ME HAS DESTROZADO LA VIDA! ME HAS DESTROZADO LA VIDA!
Los miembros de Infinite y yo nos mirábamos con pánico en la mirada, pero finalmente Sungyeol soltó el brazo de Myungsoo y antes de que éste pudiese abalanzarse sobre Byunghyun, le plantó una sonora bofetada que resonó a través de la música electrónica. Myungsoo se quedó de piedra, levantando lentamente la mirada hasta Sungyeol, que le miraba impasible. Un segundo después, Howon también soltó a Myungsoo.
- Cierra el pico. - Siseó. Jamás me había imaginado a Sungyeol enfadado, pero esta vez parecía realmente furioso. - Cierra esa boca sucia que tienes y admite tus errores como un hombre en vez de hacer el ridículo de esta forma.
Myungsoo parecía haberse congelado, porque ni parpadeaba. Probablemente el shock y el cambio de ambiente repentino. El golpe de su novio había enfriado completamente su rabia, pero yo no podía evitar mirar a Sungjong, que entre todo el jaleo, era el único que no se había movido ni un centímetro desde la llegada de Byunghyun. Había estado inmóvil durante la pelea, solamente siguiendo los movimientos con la mirada. Parecía un muñeco, uno triste y roto.
- Creo que esto no ha sido una buena idea. - Susurró Byunghyun a mi lado, girándose sobre sus pasos y caminando de nuevo a la puerta.
- Tú. - Le llamó Howon, haciendo que se detuviese. - Mírame.
Byunghyun se giró, lentamente, y ellos que no le conocían no pudieron notarlo, pero yo supe que estaba al borde del llanto. Por eso quería irse.
- Hyung?
- No soy quien para golpearte, pero te aseguro que ganas no me faltan. - Dijo, acercándose a él con normalidad y seriedad. Byunghyun le miró, cansado y triste. Howon no le golpearía, él no era así, pero a mí me daba todo muchísima pena. - Aun así, sí que puedo decirte cinco cosas, porque hablar y plantarte la verdad en la cara no es ilegal.
Dongwoo se acercó a Howon, colocándose detrás y tomando su mano. Howon temblaba, me imagino que para alguien tan pacifista y enemigo de la violencia, aquello tenía que ser un infierno.
- Tú también aprende a enmendar tus errores, discúlpate si es necesario, y aprende a vivir con lo que has hecho. Sé un hombre y madura. Enfréntate a la realidad. - Byunghyun bajó la mirada ante sus palabras, y Howon se giró hacia Sungjong, con la misma expresión de crudeza. - Lo mismo va por ti. Sé que duele, y más que dolerá, pero madura y enfréntate a los hechos.
Un reflejo atravesó la mirada muerta de Sungjong, pero no dijo nada, solamente tragó saliva. Ya era más de lo que había hecho desde que se había construido ese caparazón a prueba de todo, aunque parecía que Howon conocía el punto más frágil de éste. No por nada llevaban juntos tantos años. Lo entendía, porque yo también podía conocer así de bien a mis pequeños del grupo.
- Howon… - Susurró Dongwoo, rodeándole los hombros con un brazo. - Vámonos a casa, sí? Ya hemos hecho lo que teníamos que hacer aquí. Ahora está en sus manos.
Howon le miró con el gesto húmedo y asintió lentamente. Comenzaron a caminar hacia la puerta, pero entonces Dongwoo le pidió a su novio que esperase y se acercó rápidamente a Sungjong, mirándole fijamente. Sungjong también le miró, y yo creí que le iría a decir lo mismo que Howon, pero no, simplemente le sonrió con ternura y le abrazó con fuerza, tantas que le levantó en el aire. Sungjong parpadeó repetidamente, y le miró, con el labio inferior temblando. El gesto más dulce que había visto en mucho tiempo.
- Eres más fuerte de lo que crees, pequeño Padawan. - Le susurró, despeinándole el pelo con ternura. Los ojos de Sungjong se humedecieron a medida que Dongwoo corría hacia Howon y desaparecían por la puerta del bar. Su respiración se hizo más fuerte y entrecortada, como si estuviese llorando, pero las lágrimas no lograban caer por sus ojos. Le observé, con tristeza, y también observé cómo Myungsoo se secaba disimuladamente las lágrimas de frustración. Yo no creía que Myungsoo fuese tan malo en el fondo… Todos cometemos errores, y él estaba intentando enmendarlos en la única forma que conocía. No podíamos culparle por ello, solamente enseñarle, y eso es lo que hacía Sungyeol, que mantenía su mano entrelazada con la de él en un gesto de cariño.
- Nosotros también nos vamos a ir. - Susurró, acercándose a Sungjong, que le miró con lo que yo entendí como desesperación. Se sentía solo sin ellos… Y también podía entender eso. - Oye… - Le dijo, acariciándole una mejilla y sonriéndole con ternura. - Cuando acabes, ven a casa, sí? No te aísles… Que somos tu familia.
El rostro de Sungjong realmente parecía a punto de colapsar. El nivel de aguante de ese chico era increíble… Yo no era tan fuerte como él. Ni la mitad siquiera.
- Lo siento. - Dijo Myungsoo, parándose delante de él. Sungjong le miró, con tristeza. En el fondo Sungjong también sabía que Myungsoo lo estaba intentando… Se le notaba en los ojos. - Espero que algún día puedas perdonarme. Pero no te comportes como yo lo habría hecho… Y abre los ojos, para lo bueno y para lo malo.
Sin más, le dio una palmadita en el hombro y se dejó guiar por Sungyeol hasta el principio de la barra, donde cogieron sus abrigos y bolsos, y se fueron. Solamente quedaba yo.
Byunghyun lloraba en silencio a mi lado, sin quitarle la mirada de encima a Sungjong, que también le miraba fijamente. Parecían estar compartiendo algún tipo de mensaje que yo no lograba entender, porque no estaba dentro de ese vínculo que tenían. Aquello era más que gustarse, era más que amor… Aquello no tenía nombre. Era como si hubiesen nacido para encontrarse el uno con el otro.
- Yo… Quiero disculparme con ambos. - Me armé de valor y me coloqué entre ambos, mirando al suelo e intentando que mi boca no se quedase seca. Todos mis fluidos se agolpaban en mis ojos, deseando desbordarse y romper en llanto. - No me he comportado como hubiese debido con ninguno, pero… Realmente espero que hoy podáis dejar las cosas claras entre vosotros. Hablad, no gritéis, y no os engañéis el uno al otro, ni a vosotros mismos. Confío en que lograréis ser sinceros y limpiar este desastre que he causado.
- No ha sido…
- Calla. - Interrumpí a Byunghyun, que me miraba, conmovido pero con miedo. Sabía que a él también le tocaría quedarse ahora solo frente a la realidad, y eso asustaba. Yo estaba recibiendo el dolor que ésta acarreaba. - Yo me iré ahora. - Dije, mirando a los ojos a Byunghyun. Esta vez sí que era una despedida en toda regla. - Te quiero… - Susurré, tragando una saliva inexistente y dejándome la vida en contener las lágrimas. - Suerte, chicos. De verdad.
No esperé más, ni me molesté en saber cómo me miraba Sungjong, solamente quería desaparecer de allí, y eso hice, saliendo lo más rápido que me permitían las piernas de aquel local en los suburbios de Seúl.
- Adiós, Byunghyun. - Dije, sonriendo a la luna entre lágrimas, que cortaban mi piel a causa del frío. - Te amé, te amé tanto…
Caminaba de vuelta a casa porque coger un taxi era un lujo que no quería permitirme. Quería ver salir el sol, quería que me doliesen las piernas de caminar, quería que la luna se riese de mí hasta el último momento.
- Chanhee? - Me giré al escuchar mi nombre, y miré sorprendido a Changbum, que me miraba de la misma forma. - Qué haces aquí? Estás bien?
Asentí, con una sonrisa más falsa que la de la Gioconda.
- Y tú? - Susurré.
- Acabo de salir de la práctica. - Respondió, dándole golpecitos suaves a la bolsa de deporte que colgaba de su hombro.
- Oh, cierto, vais a hacer comeback, no? - Asintió, con una sonrisa emocionada.
- Yo soy de los peores en baile… Por eso me quedo hasta tan tarde. O temprano, depende de por dónde lo mires.
Asentí, riendo suavemente, aunque era lo que menos me apetecía. Pero entonces, Changbum dejó caer la bolsa y se acercó a mí, abrazándome con fuerza. Era alto, muy alto, y se me hacía extraño que alguien de esa estatura me abrazase.
- Dónde está Byunghyun? - Susurró. Yo parpadeé en su pecho y comencé a llorar desconsoladamente de nuevo. - Entiendo… No digas nada.
Me despegó de su cuerpo y me miró con dulzura. Ese chico, que me había pedido salir incontables veces… Cuándo había crecido tanto? Me imaginé que en el mismo momento en el que lo había hecho yo.
- Chanhee, - Me dijo, sin cambiar su expresión. Sus ojos se clavaban en los míos, y parecía que podían leer absolutamente todo lo que se me pasaba por la cabeza. - quieres que vaya a tu casa?
Le miré fijamente unos segundos más, y después le miré, desde los pies hasta la cabeza, analizando los cambios que había sufrido desde la última vez que me había fijado en él. Nada mal.
- Vale.



2 comentarios:

  1. Hi~

    Me encantó el comienzo, aunque por un momento pensé que iba a desatarse el caos entre Ricky y Chanjo, pero menos mal que no fue así y ahora están bien (Más que bien ¬u¬) A pesar de todo, me siguen pareciendo los más tiernos, y siempre me lo parecerán, hagan lo que hagan... XD

    Eso fue la parte feliz y bonita... ahora vamos a lo siguiente...

    Ohhh acabas de hacerme llorar por millonésima vez (¿Qué ser insensible no lloraría con esto? XD) Pero además de estar lloriqueando como un cachorro bajo la lluvia con toda esa situación, me pusiste en una situación de no saber con quien enfadarme, cuando Sungjong golpeó a Chunji estaba como, ¿¡Cómo se atreve!? pero era comprensible, más que comprensible, y me lié con todos mis extraños sentimientos encontrados y a la final no me pude enfadar con nadie (?) Sin sentido pls... XD

    Myungsoo... realmente no me enfadó su comportamiento, es verdad, actuó un poco mal, pero sé que ha cambiado, solo intentaba proteger, a su manera, al Maknae... ¡Ya ha salido del lado oscuro!

    Sungjong... me parte el corazón verlo tan... roto ;^; espero que se arreglen de una vez por todas las cosas, mi corazón ya no podrá soportar más cosas malas T^T
    Me gustó mucho cuando los miembros del grupos le mostraron su apoyo <3 fue realmente bonito.
    Ahora a ver que pasa con L.joe...

    Y Chanhee... con su despedida me mató, pero si es que se parte el alma solo de pensarlo otra vez, aunque al final, se encontró con Changbum, espero que con él pueda olvidar todo el caos que ha vivido últimamente. Aunque si le hace el más mínimo daño, juro que entraré ahí y le arrancaré la piel a tiras (?) y no, no estoy siendo sobreprotectora (bueno, un poco sí) ¡Pero tengo toda la razón de serlo!

    Hasta aquí mi comentario, ¡uno de los mejores capítulos! <3 ¡me gusto muchísimo! ¡Eres genial!

    ¡Ah!, y perdón por tardar en comentar, estaba mala (No salgas a caminar sin ningún sentido bajo la lluvia XD) Además, no quieres leer un comentario mio teniendo fiebre, créeme XD
    Bye~~ <3

    PD: No se si hice algo mal o qué pasó con el comentario de arriba, pero salió jodidamente extraño (creo que sigo con fiebre XD)

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    1. Ya se ha desatado lo suficiente el caos por aquí xD Y son unos cachorritos <3
      No lloreeeeees D: Lo de que al final no te enfadas con nadie me ha hecho mucha gracia xDDDDD
      Myungsoo ahora es buena gente :3
      Sungjong está muy depre ;; A ver cómo le va en el capítulo que viene
      Changbum también es buena gente... Y para un polvete llega de sobra xD
      Me alegro de que te gustase tantoooooo <3 <3 lof infinito pa'ti.

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